A las seis de la tarde del lunes 12 de mayo, la selva del Caquetá comenzaba a engullir los últimos rayos del día cuando la violencia volvió a marcar su territorio. En la vía que une los municipios de Puerto Rico y San Vicente del Caguán, una escena propia de los años más duros del conflicto armado colombiano se repitió con una brutalidad que hiela la sangre.
Lea aquí: Falleció el expresidente uruguayo José ‘Pepe’ Mujica
Un bus de dos pisos de la empresa Cootranscaquetá, que cubría la ruta hacia Bogotá, se convirtió en el blanco de un grupo de hombres armados que, según las primeras versiones, habrían instalado un retén ilegal en medio de la carretera. El vehículo, identificado con placas WFW-186 y número interno 20700, fue detenido a la fuerza. Dentro iban tres pasajeros y el conductor. El asalto fue rápido, coordinado, implacable.