La Federación Nacional de Personeros censuró esos señalamientos, solicitó retractarse ya que pone en riesgo la vida del defensor de los derechos humanos y toda la familia. “Vemos con gran preocupación la estigmatización por parte del ministerio del Interior, es un grave atentado contra los que defienden los derechos humanos. Es inaceptable, irresponsable y peligroso pues, con esas palabras exponen su vida y de la familia, eso no se puede permitir”.
La Defensoría del Pueblo señaló que las afirmaciones del ministro son incompatibles con el deber del Estado de proteger y fortalecer a las instituciones que velan por los derechos humanos: “Cuestionar desde el terreno las medidas del Gobierno hace parte de la legítima labor y convertir esa crítica en motivo de sospecha compromete la integridad en contextos como el Catatumbo, donde las condiciones de seguridad son frágiles. Cada palabra pronunciada desde el Gobierno tiene un impacto real sobre la vida de quienes trabajan por la garantía de los derechos”, señalan a través de un comunicado.
Lea además: Obispo de Ocaña pide a los violentos buscar el camino del diálogo
“Hago responsable al Gobierno nacional de cualquier afectación contra mí y los seres queridos, es una situación bastante compleja, pero estamos articulando desde la Defensoría del Pueblo en acompañamiento con la Procuraduría General de la Nación para que se esclarezca porque jamás he pertenecido a grupo armado y he sido neutral ante cualquier situación registrada en la región”, dijo el personero quien solicitó excluir a la población de la confrontación.
Los trinos del ministro y las declaraciones del presidente de la República, Gustavo Petro, han causado malestar en la comunidad del Catatumbo donde piden efectividad de los programas para neutralizar a los violentos, en vez de hacer señalamientos.