Un atroz crimen, cometido por un niño de 13 años, ha generado conmoción a nivel internacional. Se trata de Youssef A., quien confesó haber asesinado y desmembrado a su compañero de clase, identificado como Mohammed A. M., de la misma edad.
De acuerdo con la declaración que dio el menor a las autoridades de la Gobernación de Ismailia, en Egipto, le quitó la vida a Mohammed porque quería “replicar lo que había visto en una película y un videojuego”.
El caso se destapó cuando la Policía acudió al llamado de ciudadanos que hallaron restos humanos en un centro comercial y, tras realizar la pruebas pertinentes, se pudo confirmar que pertenecían a Mohammed, quien había sido reportado como desaparecido días atrás.
Youssef fue interrogado debido a que él fue la última persona que lo vio con vida. Así lo confirmó en su declaración, pues relató fríamente todo lo sucedido.
Así cometió Youssef el crimen de su compañero de 13 años
Los agentes quedaron impactados cuando el menor dijo que había citado a su compañero en la casa de su familia, donde lo atacó con un palo de madera hasta que lo mató.
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Para desmembrarlo utilizó una sierra eléctrica y las partes las esparció por diferentes puntos de la ciudad. Las autoridades hallaron fragmentos del cadáver, con la guía del propio menor, debajo de un puente, en una piscina y en un campo abierto.
Cabe mencionar que la tranquilidad de Youssef al contar lo que hizo fue alarmante para los agentes, ya que también confesó no solo mutiló a su compañero, sino que probó parte del cuerpo “por curiosidad”, asegurando que “tenía un sabor similar al pollo empanizado”.
La Fiscalía ordenó que se le realizara una evaluación psicológica completa al menor y análisis forenses a la víctima para confirmar su autoría y determinar cuál es su estado mental.
Entre tanto, las autoridades detuvieron al autor del crimen y lo mantuvieron cuatro días bajo custodia del Ministerio Público mientras avanzaban en la investigación. Posteriormente, permaneció otra semana en un centro de atención para menores.
Piden justicia por la muerte de niño de 13 años en Egipto
Por su parte, la comunidad de Ismailia despidió a Mohammed con una multitudinaria oración en la mezquita Al-Matafi antes de su entierro en el cementerio familiar de Kassab. El caso generó un profundo rechazo y encendió una alerta global sobre la exposición de los menores a contenidos violentos en videojuegos, películas y redes sociales.
Expertos en comportamiento infantil y autoridades locales coincidieron en que el crimen evidencia la falta de control y acompañamiento en el consumo de contenido audiovisual por parte de niños y adolescentes, un problema que, según psicólogos, está alcanzando niveles preocupantes en todo el mundo.
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