La detonación de tres disparos al interior de un establecimiento comercial en el barrio La Victoria, fueron el aviso premonitorio de que la muerte volvió a rondar por ese sector de la Ciudadela Juan Atalaya. En esta ocasión, se llevó consigo a Yony Sneiders Fuentes Useche.
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Durante el intenso y ardiente sol de mediodía, Yony Sneiders Fuentes Useche, un joven residente en la parte alta del barrio, se dirigió a arreglar su motocicleta Bera, roja, en un montallantas ubicado en la avenida 2 entre calles 4 y 5, sin saber que esta sería su última acción en el mundo terrenal.
Conforme a información de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc), mientras Yony Sneiders se encontraba en ese lugar, vio a lo lejos dos sujetos en una motocicleta que se dirigían justo hacia él.
Acto seguido, el joven, que estaba en la acera, corrió desesperado al interior del montallantas para esconderse, pero los motorizados también ingresaron al mismo y le dispararon en la espalda y rostro sin mediar palabra alguna.
Las heridas fueron suficientes para que la víctima, conocida como el Conejo, perdiera la vida segundos después.
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Funcionarios de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) arribaron al lugar de los hechos para realizar la inspección técnica de la escena, adelantar las pesquisas del crimen, y hacer el levantamiento del cadáver.
“Nosotros estábamos adentro de nuestra casa cuando escuchamos los disparos y segundos después el sonido a toda velocidad de una motocicleta. Pero, salimos y no vimos nada, hasta que nos dijeron que lo habían matado adentro del montallantas”, comentó una residente.
La compañera sentimental del occiso, en diálogo con uniformados de la Mecuc, manifestó que su pareja no tendría amenazas ni problemas con alguna persona, pero las investigaciones habrían de demostrar otra cosa.
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¿Un conejo malo?
Aunque la pareja mencionó que el Conejo se ganaba la vida en el oficio de la construcción, además de ser cotero en Cenabastos, las autoridades policiales pudieron conocer que esta persona presuntamente estaría relacionada con microtráfico.
El Conejo hace unos días recibió una llamada de un sujeto que se hacía llamar Porras o Viejo, ofreciéndole que trabajara para él, a lo cual la víctima se habría negado.
No obstante, todo continúa siendo materia de investigación para las autoridades policiales, que siguen con las investigaciones para conocer con certeza los móviles que desencadenaron este nuevo hecho de sangre.
En ese barrio de la Comuna 8 tendría injerencia delictiva el grupo delincuencial Familia P.
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Apasionado del Cúcuta
Conejo era un fiel hincha del Cúcuta Deportivo, perteneciente al parche La Victoria, representativo del barrio en el cual había vivido durante un largo tiempo, siendo miembro de La Banda del Indio, la barra popular del ‘Doblemente Glorioso’.
Dentro de las actividades grupales que realizaban era común verlo participando, incluso fue uno de los responsables de la realización del mural alusivo al rojinegro en la entrada a La Victoria.
“Conejo no está muerto, sigue vivo aquí adentro”, publicó el parche por redes sociales minutos después del asesinato, publicación que se llenó de mensajes de condolencias de los demás integrantes, quienes entre incredulidad y dolor, manifestaron que Useche ahora vivirá como uno de los ‘eternos’ de la barra.
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