Un escaparate en llamas, una gran nube de humo y un adulto mayor sin vida recostado en la pared de la habitación fue la escena que encontraron dos de los hijos de la víctima y los bomberos de Cúcuta en una habitación de la vivienda #4-90, en la calle 9 con avenida 5 del barrio Comuneros.

Se acercaba la medianoche y Francisco Antonio Monteverde, de 85 años y oriundo de Salazar de las Palmas, dormía en su cuarto. El hombre no supo en qué momento se originó el incendio que terminó por acabar con su vida. La emergencia fue comunicada por la familia, a las 11:30 de la noche del pasado viernes.

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“Yo estaba en mi casa, que queda a la vuelta, y vi el humo desde allá. Al rato escuché todo el alboroto”, dijo uno de los habitantes del sector.

Una de las residentes, que tiene un puesto de loterías, expresó que ‘don Francisco’, como lo conocían en el sector, siempre iba a ese lugar para hacer efectivo el subsidio de Colombia Mayor y cancelar puntualmente los recibos. “Yo le decía cariñosamente que era mi novio, porque era una persona muy amable”, apuntó.

María Torcoroma Monteverde, la hija mayor del fallecido, precisó que él era vendedor ambulante y “trabajaba porque quería, pues, no le gustaba quedarse quieto, era muy activo”. Sus 10 hijos estaban pendientes de él y de su sostenimiento. 

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“Solo se quemó el cuarto. Creemos que fue un corto lo que originó todo. Quizás, cuando se despertó, vio el incendio, se levantó y quiso apagarlo, porque era la ropa de él que se estaba quemado, para intentar salir y no pudo”, resaltó la familiar de la víctima.

También recordó que en marzo su padre celebró su último cumpleaños, con un sencillo agasajo, momento que hoy la llena de nostalgia a ella y a sus seres queridos. 

“El domingo pasado le traje el almuerzo, como regularmente lo hacía, porque mientras vivió aquí, venía a visitarlo continuamente”, subrayó María Torcoroma Monteverde.

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Los hechos

Las indagaciones preliminares de lo ocurrido indican que la víctima aseguró por dentro la puerta, por eso sus hijos no pudieron ingresar a ayudarlo desde el primero momento en el que se percataron del incendio. 

“Cuando la brigada llegó al sitio, procedió a pagar las llamas que quedaban del escaparate y a extraer el humo. El cuerpo no registraba quemaduras ni fracturas”, dijo un bombero a este medio, resaltando que los hijos de Francisco Antonio Monteverde tuvieron que forzar la puerta para ingresar, pero fue demasiado tarde.

De acuerdo con el reporte del Cuerpo de Bomberos Voluntario de Cúcuta y de la Policía Metropolitana (Mecuc), la víctima murió asfixiada. Posteriormente, llegó la comisión de la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) para practicar el levantamiento del cadáver.

Para los apagafuegos, la magnitud del incendio fue leve, porque solo se quemó el closet y se ahumaron las paredes. Las causas son investigadas y, aunque no se descarta un cortocircuito, se cree que dentro del cuarto había alguna vela encendida que desató la conflagración.

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