En Cúcuta se generan anualmente cerca de 25.000 camiones cargados de basura. Lo preocupante es que el 49,5% de esos desechos corresponde a residuos orgánicos que podrían tener un aprovechamiento productivo. Ante este panorama, la Mesa Cúcuta Circular puso en marcha un modelo piloto de negocios de valorización de residuos orgánicos, que arranca desde la reconocida zona gastronómica de Los Caobos.
El proyecto, pionero en la capital nortesantandereana, es liderado por Alianza R, Veolia y los negocios gastronómicos de Los Caobos, con el respaldo de la Alcaldía de Cúcuta y la Agencia de Cooperación Alemana, GIZ.
Tres etapas para transformar la gestión de residuos
Según Tatiana Cáceres, asesora de la alcaldía para este proyecto, el plan piloto fue diseñado en tres fases clave para garantizar su funcionamiento:
Etapa uno, socialización: se realizaron visitas individuales a 73 establecimientos gastronómicos, logrando que 67 manifestaran interés en participar.
Lea aquí: La Buena Vibra: promotores del teatro en Cúcuta
Etapa dos, sensibilización: los negocios vinculados recibieron capacitación en separación en la fuente, horarios y formas de recolección.
Etapa tres, implementación: finalmente, 57 locales gastronómicos iniciaron el proceso formal de aprovechamiento.
En los primeros dos meses de operación se lograron 1,6 toneladas diarias de residuos orgánicos recolectados, lo que equivale a 94 toneladas en 60 días, destacó la asesora de la Alcaldía, Tatiana Cáceres.
La clave, la separación en la fuente
El esquema de trabajo inicia en cada establecimiento gastronómico, donde el personal entrega los residuos al operador Alianza R, encargado de trasladarlos a Veolia, que los procesa en su planta de valorización de orgánicos ubicada en el Parque Tecnológico Ambiental Guayabal.
La planta fue cofinanciada con recursos del Incentivo al Aprovechamiento y Tratamiento de Residuos Sólidos (IAT) y actualmente produce materiales bioestabilizantes usados en el cierre de celdas del relleno sanitario. La proyección a futuro es la fabricación de abonos orgánicos certificados que beneficien tanto a agricultores rurales como a programas de ornato y paisajismo en la ciudad.
Lea también: Con prueba piloto analizan descongestión vial en la avenida Los Libertadores
Beneficios ambientales y sociales
Según Cáceres, con la consolidación de este modelo de economía circular se busca:
Aumentar la vida útil del relleno sanitario.
Reducir la sobrecarga ambiental y los gases de efecto invernadero.
Generar oportunidades de negocio y crecimiento económico.
Incentivar la cultura ciudadana de separación en la fuente.
Dignificar la labor del reciclador de oficio.
Mejorar la percepción de limpieza y seguridad en Cúcuta.
Además, se ha evidenciado un impacto social en Los Caobos: la disminución de habitantes de calle escarbando en bolsas de basura, dado que los negocios ya no sacan residuos en horas nocturnas. Ahora, gracias a las rutas programadas de Alianza R y Veolia, los comerciantes entregan de manera organizada tanto residuos aprovechables como orgánicos y ordinarios.
Meta al 2026: cobertura total en la ciudad
La Alcaldía de Cúcuta proyecta extender este modelo a otros sectores de la ciudad a partir de los mapas de calor de generación de residuos orgánicos. El objetivo es que hacia el año 2026 se logre cobertura total en la capital nortesantandereana.
“Estos primeros 57 negocios de Los Caobos nos están dando ejemplo de separación en la fuente. Con ellos veníamos trabajando el tema de residuos aprovechables y ahora sumamos los orgánicos. Esto es un paso histórico hacia la transformación de Cúcuta con enfoque en economía circular”, puntualizó Cáceres.