El Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia emitió este miércoles un comunicado en el que rechazó “en los más drásticos términos” la detención de las colombianas Luna Barreto y Manuela Bedoya, integrantes de la Flotilla Global “Sumud”, quienes fueron capturadas por fuerzas israelíes cuando navegaban en aguas internacionales a bordo de la embarcación HIO.
La Cancillería calificó el hecho como una violación al derecho internacional y a los Acuerdos de Ginebra, y exigió la liberación inmediata no solo de las dos connacionales, sino de todos los integrantes de la flotilla, entre ellos ciudadanos de países como España, Brasil, Irlanda, Indonesia, Qatar y Sudáfrica.
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Según el comunicado, la flotilla tenía tres objetivos: entregar ayuda humanitaria a la Franja de Gaza, generar conciencia sobre las necesidades urgentes del pueblo palestino y alertar sobre la importancia de detener la guerra en ese territorio.
El Gobierno colombiano instó a la comunidad internacional a pronunciarse y actuar de manera conjunta para proteger la vida e integridad de los detenidos. “Ninguna política de Estado puede justificar la masacre y la detención ilegal de los ciudadanos que quieren aportar a la paz”, indicó la Cancillería.
