Con el puño arriba, sujetando un lápiz para simbolizar la resistencia a las decisiones arbitrarias del Gobierno Nacional y la firme convicción del deber cumplido, los maestros salieron de la zona del Catatumbo a la capital del departamento para rechazar los resultados del concurso de méritos encaminado a proveer las plazas del magisterio en Norte de Santander.
Calificaron como una ‘masacre’ laboral en contra de los docentes que llevan hasta 20 años, de manera provisional, formando niños y jóvenes en apartadas escuelas de la zona rural de los municipios incluidos en los Planes de
Desarrollo con Enfoque Territorial, PDET, en cumplimiento de los acuerdos de paz suscritos en la Habana, Cuba.
El malestar social se presenta en los municipios de Tibú, Sardinata, El Tarra, San Calixto, Convención, Teorama, Hacarí y El Carmen.
El vocero sindical de la vereda Petrolea en Tibú, Luis Olides Rojas Bohórquez, manifestó que el concurso desde un principio generó un inconformismo en el gremio, porque no llenaba las expectativas.
“A tal punto que el correspondiente a la básica primaria fue anulado al descubrirse un fraude. Sin embargo, el relacionado con los perfiles de las áreas específicas de bachillerato y directivos docentes del sector rural se efectuó y vemos cómo se ha desplazado a muchos compañeros por profesionales de otras regiones del país”, recalcó.
En efecto, un gran porcentaje de los maestros del Catatumbo no obtuvieron el puntaje requerido y llegarán otras personas a ocupar esas plazas quedando como desempleados a partir de la fecha.
La secretaría de Educación Departamental en cumplimiento del decreto 882 del Gobierno Nacional convocó a las audiencias públicas virtuales con los profesionales de mayor puntaje y proceder al nombramiento oficial añorado por los maestros en condiciones de provisionalidad.
Integrantes de la Asociación Sindical de Institutores Nortesantandereanos (Asinort), intercedió y propuso al gobierno seccional reubicar a los profesores en aquellos lugares donde hayan vacantes para evitar el traumatismo.
El fiscal, Hugo Cárdenas Vega, indica que la lucha ha sido bastante dura desde el 2016 cuando se logran los acuerdos de paz.
Una decisión salomónica
Asinort exigió garantías para que los docentes del Catatumbo mantengan sus provisionalidades.
“Luego de haber agotado acciones jurídicas, de movilización de los docentes y las comunidades especialmente del Catatumbo, se recibe como respuesta de este gobierno a través de la Comisión del Servicio Civil, la imposición de las etapas del concurso especial para las zonas de conflicto en lo referido a directivos docentes y especialidades”, indicó la asociación a través de un comunicado.
Aseguraron que la convocatoria a las audiencias públicas para la escogencia de las instituciones educativas por parte de los docentes que aprobaron el concurso, crea de paso una grave situación social para gran número de maestros que están ante la evidencia de perder su empleo provisional.
Propusieron al gobierno seccional reubicar a los profesores a plazas vacantes definitivas dentro de la nómina oficial del departamento, sin necesidad de agotar el procedimiento establecido en el Sistema Maestro, evitando así que se acreciente la inconformidad social y la profundización de la crisis en el Catatumbo.