"100% chavista"
"¡Estamos sin luz!", grita desde una vivienda una mujer al ver pasar a Arreaza, en un vehículo todo terreno tipo militar, sin techo, con un rótulo en el parabrisas que lee: "¡Vuelve la esperanza!".
Es el eslogan de Arreaza, que vende un discurso de cambio, renovación, pese a que el chavismo ha gobernado en este estado desde 1998, siempre por un miembro de la familia Chávez, en medio de denuncias de corrupción y abandono.
En las regionales de noviembre la oposición se encaminaba al triunfo, pero el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), de línea oficialista, ordenó suspender el conteo de votos y fijó nuevos comicios para el 9 de enero.
El candidato opositor, Freddy Superlano, quedó fuera de competencia, alegando que estaba "inhabilitado" por investigaciones judiciales.
Argenis Chávez (2017-2021), hermano del expresidente y último de la dinastía gobernante, renunció a buscar la reelección tras la inminente derrota. Antes de él gobernó su padre, Hugo de los Reyes Chávez (1998-2008) y luego otro hermano, Adán (2008-2016).
"Le tengo mucha confianza a Arreaza. Va a echarle bolas (trabajar duro)", dice Juan Antonio Lucena, un chofer jubilado de 66 años, presente en la caravana de Arreaza. Se jacta de ser "100% chavista", como la mayoría en este pueblo, y haber jugado softbol con Chávez.
El gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) ganó la alcaldía del municipio Alberto Arvelo, donde está enclavada Sabaneta.