Daños millonarios
En cada una de las casas vivían tres personas y ahora están buscando una forma de poder reconstruir el lugar, pero no cuentan con los recursos económicos. La casa menos quemada resultó con grietas y el tanque de agua se derritió por completo.
La vivienda, con fachada blanca, que estaba al lado, perdió en su totalidad dos habitaciones, pues hasta el techo colapsó dejando a su paso escombros y pequeños vestigios de madera y ropa.
Finalmente, la residencia con fachada azul, que estaba al frente de la última casa mencionada, aunque su techo no colapsó, todos los electrodomésticos, junto con los colchones, prendas y closet de madera, sucumbieron a la fuerza del calor, dejando a la familia con muy pocas cosas para salvar de las llamas.
“Estas son viviendas de obreros y gente que trabaja honradamente, la verdad no nos merecemos algo así. Por ahora, no se ha acercado ninguna institución para dar una solución o una ayuda para hacer habitables las casas de nuevo. Y aunque no murió ninguno de nosotros, esos desalmados mataron a nuestra perrita. ¿Qué les hace un animal de esos?, les hace falta corazón a esas personas”, concluyó entre lágrimas la propietaria.