La pandemia del coronavirus no ha detenido las actividades del Centro Misionero Nueva Vida, Misericordia Cada Día, en el asentamiento La Fortaleza en Cúcuta. A pesar de no entregar por ahora los 500 almuerzos diarios a las personas más necesitadas de la comunidad, el espacio sigue sirviendo con capacitaciones de emprendimiento, recreación y formación de líderes dirigido a migrantes venezolanos y retornados colombianos.
La hermana Patricia Celis Villamarín, misionera del centro, recordó que hacen vida en este lugar desde hace 7 años, cerca del anillo vial occidental. Tenían un comedor en otro sector de la ciudad, pero al ver la necesidad en La Fortaleza decidieron trasladarlo hasta ese sitio, donde compartieron los alimentos preparados incluso con habitantes de zonas aledañas como La Esmeralda, Nueva Ilusión y Talento. Destacó que el trabajo ha sido integral con miembros de la colectividad y de representantes de organizaciones de cooperación internacional.
“Debido a la pandemia ya no ofrecen la comida preparada y por diferentes circunstancias que se fueron presentando, algunos donantes dejaron de colaborar, pero siguieron apoyando a la comunidad en diferentes aspectos para el enriquecimiento de cada uno de ellos en la parte de emprendimiento, de fortalecimiento de sus capacidades y por eso desde aquí se hacen diferentes encuentros”, dijo la hermana Patricia.
Los días martes ofrecen capacitaciones en manicure y pedicure a 36 madres gestantes, lactantes. Estas actividades se hacen con autogestión, ya que es una de las migrantes venezolanas con capacidad en esta área quien se encarga compartir sus conocimientos con las demás compañeras. Ellas aprenden un arte y les ayuda a mejorar su economía.
Los jueves se imparten clases de confección y costura, cuenta con 16 participantes.
Los viernes atienden a 30 adultos mayores con clases de manualidades.
También cuentan con la capacitación de líderes y en la red comunitaria de salud.
“Gracias al apoyo de la OIM y USAID se han tenido estas formaciones y capacitaciones en los diferentes aspectos de salud, que ellos pueden identificar y remitir casos para ayudar a esta población, integrada por migrantes, retornados y comunidad de acogida”, sostuvo la misionera.
Hermana Patricia Celis Villamarín, coordinadora del Centro Misionero Nueva Vida, Misericordia Cada Día
Para el Centro Misionero Nueva Vida, Misericordia Cada Día, es de suma alegría poder colaborar con estas personas, que va más allá de un plato de comida, sino de ofrecerles una enseñanza que les sirva para su formación y los ayude a reactivar la economía de los hogares. “Es gratificante las personas que se han querido ir vinculando para poder impartir estos conocimientos”, sostuvo la hermana Patricia.
También tienen entre sus proyectos otras enseñanzas como panadería básica y peluquería.
Además se creó la Asociación de Líderes de La Fortaleza que con sus 30 voluntarios apoyan al Centro Misionero en diferentes actividades como brigadas de salud, policía ambiental junto con miembros de la Cruz Roja. Dicha entidad de líderes ha recibido la colaboración de la organización Ayuda en Acción, la cual le ha brindado su colaboración en las capacitaciones.
Las hermanas se encuentran planificando un baby shower a 30 mujeres de La Fortaleza, en el que reciban los utensilios necesarios para atender a sus bebés. Quienes se quieran vincular a esta actividad, programada para junio de 2021, con ropa, pañales, tinas, lo pueden hacer a través del Centro Misionero, ubicado en la MZ K, lote 13 de La Fortaleza.