El barrio El Callejón se ha convertido en una de las zonas más neurálgicas de Cúcuta. Durante años, esta zona ha sido azotada por la delincuencia y criminalidad que por medio de la extorsión, atracos y microtráfico, han sembrado miedo y terror en esta zona céntrica de la ciudad.
Además, este sector está bajo las garras de Los AK-47, donde los habitantes de calle son su principal fuente para hacer de las suyas, convirtiéndolo en un escenario perfecto para que estos criminales lo tengan bajo su dominio.
El más reciente hecho de violencia se registró en la avenida 5 con calle 4, de este sector de la Comuna 1 de Cúcuta, donde el cuerpo sin vida de un hombre, de aproximadamente 40 a 45 años, quedó debajo de un árbol en toda una esquina del parque Lineal.
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Según versiones, el cadáver duró horas allí postrado. Personas iban y venían, pero nadie se percataba de aquel hecho. Fue hasta que alguien se acercó y observó que el hombre estaba sin vida y dio avisar a las autoridades.
Así fue como a las 12:20 del mediodía, una patrulla de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) arribó al sitio y se encontró con el cadáver de un hombre, aparentemente en condición de calle, que vestía una camisa blanca con rayas negras y rojas, un pantalón azul y una gorra gris.
Al lugar también llegó la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) que se encargó del levantamiento del cadáver y la inspección de la escena del crimen, que permitirían conocer cuál podría haber sido la causa de muerte y quién la cometió.
La gorra que tenía la víctima estaba manchada y cuando le fue retirada, se observó más sangre en el sitio, indicando que podría haber sido un golpe contundente en su cabeza lo que habría acabado con su vida.
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Tras el levantamiento, no se logró conocer la identidad de la víctima. Sin embargo, los murmullos que se escuchaban a los alrededores dieron a conocer cuál podría haber sido el móvil del hecho. Pues el hombre era conocido por ser un expendedor de drogas en la zona.
Solo quedan en rumores y se espera que sean las autoridades quienes determinen si se trata de un ajuste de cuentas o si hay otro motivo.
En la escena del crimen también se lograron observar algunas cámaras de seguridad y un domo de la Policía que serán piezas clave para que los investigadores den con el paradero de los culpables.
Al cierre de esta edición, el cuerpo permanecía sin ser identificado por las autoridades, por lo que seguirá en Medicina Legal a la espera de que la familia lo reconozca.
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