La tecnología es una herramienta esencial para las nuevas dinámicas de conectividad que están adoptando empresas y gobiernos en el mundo. Sin embargo, si no se cuenta con un sistema robusto que blinde la información, puede llegar a ser un puente de fácil acceso para un ataque cibernético y es aquí donde la ciberseguridad se convierte en protagonista.
Suplantación de identidad, violación de bases de datos, fraudes, malware y robos de contraseñas, son algunas de las amenazas más frecuentes a las que se
expone la información si no existe una cultura preventiva frente al ciberdelito. En este caso, podríamos ser víctimas con un sencillo correo electrónico, como los
millones que circulan a diario en el mundo y que son filtrados como maliciosos.
“El centro de inteligencia de Cisco, por ejemplo, cada día, registra que uno de cada tres mensajes de correo son usados por el cibercrimen para intentar penetrar
sistemas o robar información”, puso en contexto Juan Marino, Regional Sales Manager Cybersecurity de Cisco.
La nueva normalidad, además del trabajo remoto o el incremento de transacciones digitales, también trae un creciente volumen de operaciones corporativas digitales que tiene en alerta a entidades y autoridades en el mundo. En la primera mitad de 2020, se presentaron 7.082 denuncias por ciberdelitos lo que representa un incremento del 27%, comparado con en el mismo periodo de 2019, de acuerdo con cifras de la CCIT (Cámara Colombiana de Informática y Telecomunicaciones).