Corrían los años 90 cuando una inmobiliaria comenzó a construir casas en un lote aledaño a la avenida Demetrio Mendoza, una pequeña urbanización que, sin que sus habitantes lo esperaran, hoy ha crecido hasta tal punto que aspiran a ser ciudadela.
En sus comienzos, este barrio solo contaba con una entrada, la popular ‘bajada de Prados del Este’, un número reducido de casas lo componía y tenían dispuesto algunos espacios para la construcción de parques.
Con el esfuerzo de la comunidad, lograron hacer realidad tres de ellos, al igual que la iglesia, aunque, a la fecha, el parque principal está en deterioro y falto de iluminación.
Juan Carlos Obregón, presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) de Prados del Este, relató que el primer punto para la recreación de los niños es el conocido como el Parque de Las Parabólicas. Según cuenta, allí funcionaba la primera empresa de servicio de cable en el sector.
“Main Tv nos prestaba servicio a todos los que vivíamos acá en esa época, por eso fue bautizado con ese nombre. Incluso, aún está la caseta de lo que en algún momento fue esa empresa”, cuenta Obregón.
Por su parte, Mariela Echevarría, una de las primeras habitantes, afirma que la iglesia que hoy se levanta en el corazón del barrio comenzó siendo una choza con mesas para que los feligreses profesaran su fe.
“Los vecinos sacaban una mesa y sillas, el padre celebraba en ese lugar la eucaristía, pero con la ayuda de los párrocos que fueron llegando y distintas actividades que se fueron adelantando, logramos construir la inmensa estructura que hoy se ve”, precisó la mujer.
Entrados los 2000, un gran número de locales comerciales empezaron a instalarse en el creciente Prados del Este, luego de inaugurado el puente La Gazapa en el 2012, que mejoró las conexiones de los habitantes con el resto de la ciudad. Además se han construido más de 12 conjuntos residenciales.
“Aquí hay de todo”
Mariela Echevarría no duda ni un segundo cuando dice que Prados del Este es el ‘mejor vividero’, gracias a que es uno de los únicos barrios que tienen ‘de todo’.
“Aquí hay más o menos tres supermercados grandes, tiendas, sucursales bancarias, droguerías, ferreterías, peluquerías, además estamos a un paso del centro comercial más nuevo de la ciudad, y a otro paso de la avenida Los Libertadores, una de las más importantes”, dijo la mujer.
Juan Carlos Obregón agregó que la educación tampoco es un problema, ya que cuatro colegios han sido instalados en este sector, todos privados.
El líder comunal comentó que varios de ellos son jardines y solo uno cuenta con educación de primero a once grado. No obstante, a pocos kilómetros se encuentra el colegio público Mercedes Ábrego.
En la actualidad, Prados del Este tiene ocho parques para la recreación de los menores, tres de ellos muy conocidos por su extensión: el de Las Parabólicas, el de Los Árboles y el parque de La Iglesia.
El primero fue remodelado con una inversión de 900 millones de pesos en 2018 por la administración del alcalde César Rojas.
“Sí tenemos necesidades”
El presidente de la JAC afirmó que han sufrido de abandono estatal por varios años, esto debido a que hacen parte de la comuna 4 de la capital nortesantandereana.
“Como tenemos un buen estrato socio económico, en ocasiones creen que no tenemos necesidades y no es así”, dijo.
Enfatizó que dos de las situaciones que requieren pronta solución son el arreglo de las calles, y por fortuna, están priorizados en el programa de bacheo y señalización en las avenidas, pero, por la pandemia, no han logrado gestionar los recursos.
Los líderes comunales manifestaron también que están en charlas con la Secretaría de Tránsito de Cúcuta para establecer soluciones ante las angostas calles principales que ya están generando problema, porque, debido a que las personas estacionan sus vehículos frente a los establecimientos comerciales, el paso se ve reducido.
Sucursal de Venecia
Las calles de la entrada siempre han sido de un tamaño reducido, y cada vez que una fuerte temporada de lluvias impacta la ciudad, Prados del Este no se ve exento de inundaciones, a tal punto que sus vecinos le atribuyen el nombre de ‘la sucursal de Venecia’.
En otros tiempos, algunos recuerdan cuando el agua les llegaba casi a la cintura. Después de una gran cantidad de informes presentados, lograron la ejecución de un alcantarillado para evacuar las aguas de la zona.
Sin embargo, señalan que solo se solucionó a una parte, en La Gazapa, mientras que, adentro, el barrio sigue inundándose, en “un problema de toda la vida”. Los mismos vecinos manifiestan que la solución es sencilla, solo que hasta el momento no han sido escuchados.
Proponen la construcción de un alcantarillado desde la avenida Demetrio Mendoza, para que las aguas se desvíen hacia el río Pamplonita.
A este problema, Obregón agregó que ha hecho falta conciencia comunal, porque la misma gente ha llenado de basuras el box culvert recolector.
“Ahí se encuentran colchonetas, cauchos, lavamanos y otras basuras. Cuando hacemos gestión, las empresas de servicio público lo limpian, pero a la semana vuelve a llenarse de escombros, de manera que cuando las aguas de San Martín llegan al box culvert, al estar tapado, caen a Prados del Este por la calle 8”, puntualizó Obregón.
La batalla contra la inseguridad
Un hecho que angustió a los vecinos hace varias semanas y disparó las alarmas fue un cruce de disparos, perpetuado por delincuentes que siguieron a una persona hasta el barrio, luego de que retirara dinero en el banco.
Sin embargo, el líder comunal asegura que desde entonces no se ha vuelto a perpetuar algún hecho que perturbe la calma. Aunque un CAI móvil fue instalado, piden que se construya uno fijo para que la seguridad sea permanente.