A pesar de los elogios y reconocimientos que el presidente de la República, Iván Duque Márquez, recibió en el Parlamento Europeo, la otra cara de la moneda se vio cuando mientras el mandatario colombiano hacía su intervención, algunos eurodiputados protestaron por la visita del alguien que calificaron de no respetar los derechos humanos.
Miembros del legislativo se levantaron de sus puestos para mostrar los mensajes de sus camisetas alusivas a los nombres de los connacionales que fallecieron en medio del gran paro nacional que evidenció el abuso de la fuerza pública.
Un eurodiputado que alzó su voz en protesta de la visita fue Manu Pineda quien aseguró que el presidente Duque era el responsable de la represión social y el asesinato de líderes sociales.
“Nosotros siempre felicitamos que este parlamento discuta sobre derechos humanos, pero estarán ustedes de acuerdo conmigo que hoy no es el mejor día para hacerlo después de que desde este atril haya intervenido el responsable de una represión brutal contra su pueblo, de cientos de asesinatos de líderes y lideras sociales, de cientos de firmantes de los acuerdos de paz”, destacó Pineda ante el Parlamento.
El eurodiputado aseguró que el mandatario colombiano si estaría cumpliendo sus promesas de campaña, afirmó que una de esas cumplidas fue “hacer trizas el acuerdo de paz”.
“Nosotros hemos intentado en infinidad de ocasiones que este Parlamento debatiera sobre los constantes asesinatos en Colombia, sobre la represión a los jóvenes que han participado en el paro nacional, sobre los más de 800 desaparecidos que van apareciendo en pedazos flotando por el río, o las mujeres violadas en dependencias policiales”, afirmó Pineda.
El parlamentario europeo aseguró que durante la intervención del presidente colombiano querían hablar sobre los vínculos de la fuerza pública colombiana con el Gobierno Duque y el “uribismo”, afirmó que no fue posible porque la derecha de ese parlamento es la escudera de esos actos.
“Nos quieren hacer creer que les preocupan los derechos humanos, cuando fueron parte de un acto electoral de un presidente con las manos manchadas de sangre. Su presencia aquí ha puesto una humillación para este pleno. Nosotros seguiremos defendiendo los acuerdos de paz y los derechos humanos”, concluyó Pineda.
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