El Instituto Nacional del Cáncer refiere que la leucemia es un término amplio que describe los cánceres de células sanguíneas. El tipo de leucemia depende del tipo de célula sanguínea que se convierte en cáncer y de su crecimiento rápido o lento. La leucemia es más frecuente en adultos mayores de 55 años, pero también es el cáncer más común en niños menores de 15 años.
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Según la Sociedad Americana contra el Cáncer, la Leucemia Mieloide Crónica (LMC) se produce por un cambio genético en una versión temprana (inmadura) de células mieloides, éstas son las células que producen glóbulos rojos, plaquetas, y la mayoría de los tipos de glóbulos blancos, excepto linfocitos.
Las células leucémicas crecen y se dividen, se acumulan en la médula ósea y se extienden a la sangre. Durante este tiempo, también pueden invadir otras partes del cuerpo, incluyendo el bazo.
La Sociedad Americana contra el Cáncer señala que cada célula humana contiene 23 pares de cromosomas. La mayoría de los casos de LMC comienzan durante la división celular, cuando se intercambia el ADN entre los cromosomas 9 y 22. Parte del cromosoma 9 va al cromosoma 22 y parte del cromosoma 22 pasa al 9. Esto se conoce como una translocación, y da como resultado un cromosoma 22 que es más corto de lo normal y se llama cromosoma Filadelfia.
Por este concepto es que el 22 de septiembre (9/22) de cada año se conmemora el Día Mundial de la Leucemia Mieloide Crónica. Cabe destacar que la LMC tiene un crecimiento relativamente lento, pero puede transformarse en una leucemia aguda de crecimiento rápido, siendo los 64 años la edad promedio de diagnóstico. Este tipo de leucemia afecta principalmente a los adultos, raramente se observa en los niños.
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Para el doctor Kenny Gálvez, médico internista y hematólogo del Hospital Pablo Tobón Uribe de Medellín, no hay una causa concreta de aparición para las leucemias, como para ningún tipo de cáncer.
“Al ser un conjunto de enfermedades muy diversas, sus factores de riesgo también lo son, aunque algunos pueden ser comunes a varios de los tipos principales como: la edad, productos químicos carcinógenos, altas dosis de radiaciones ionizantes, algunos fármacos quimioterápicos, antecedentes de enfermedades de tipo hematológico, enfermedades o síndromes de tipo genético”.
¿Y cómo es la situación de la leucemia en Colombia?
En Colombia, 6.357 adultos atendidos en el marco del Sistema General de Seguridad Social del país tienen algún tipo de leucemia. De acuerdo al reporte dado por la Cuenta de Alto Costo, durante el periodo del 2 de enero de 2018 a 1 de enero de 2019, 2.238 casos (35%) son de leucemias agudas, en las personas mayores de 18 años.
La evidencia de casos reportados en Colombia por la Cuenta de Alto Costo muestra que por cada 100.000 habitantes se presentan 0.56 fallecimientos en adultos con Leucemia Mieloide Aguda. La cifra dada por la Sociedad de Leucemia y Linfoma (LLS por sus siglas en inglés) indica que cada 180 segundos a alguien se le diagnostica un cáncer de sangre y cada diagnóstico de cáncer de sangre pone vidas al revés.
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Por esto, María Fernanda Velasco, directora Médica de Pfizer Colombia, alza la voz sobre la importancia del diagnóstico oportuno de la enfermedad.
La Sociedad Americana contra el Cáncer determina que la Leucemia Mieloide Aguda, LMA o también conocida como leucemia mielocítica aguda, leucemia mielógena aguda, leucemia granulocítica aguda y leucemia no linfocítica aguda se inicia en la médula ósea, pero con más frecuencia también afecta a la sangre, propagándose a otras partes del cuerpo, incluyendo los ganglios linfáticos, el hígado, el bazo, el sistema nervioso central (el cerebro y la médula espinal) y los testículos.
“Aunque las leucemias no son enfermedades hereditarias, en algunas de ellas como la LMA, el tener antecedentes directos de leucemia en la familia puede aumentar el riesgo de padecerla”, así lo advierte el doctor Gálvez.
Agrega el especialista en hematología que “un diagnóstico tardío y en una etapa avanzada de la enfermedad, aumenta el riesgo de complicaciones entre ellas la muerte. Lo recomendado es que las personas consulten a tiempo cuando inicien los síntomas tales como fiebre, pérdida de peso, sudoración nocturna, sangrado, palidez, entre otros”.
De igual manera, tenga en cuenta las siguientes recomendaciones:
• No fumar; si lo hace déjelo lo antes posible.
• Evitar la obesidad.
• Realizar alguna actividad física de intensidad moderada todos los días.
• Aumentar el consumo de frutas, verduras y hortalizas variadas. Comer al menos 5 raciones al día.
• Limitar el consumo de alimentos que contengan grasas de origen animal.
• Moderar la ingesta de alcohol a un máximo de 2 unidades diarias si es varón, o a 1 si es mujer.
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