Las actividades académicas iniciaron en Colombia y aunque poco a poco los estudiantes se acoplan a los nuevos modelos de alternancia presencial y virtual, hay hábitos que ayudan a mejorar el desempeño y la energía, como mantener actividad física constante, darse tiempo para descansos entre clases y una alimentación balanceada.
Aunque muchos niños, niñas y adolescentes estarán en casa, es importante mantener el momento del desayuno, comida y cena en familia buscando siempre
que las porciones se encuentren balanceadas, así como respetar los horarios de comida, y asegurar que los alimentos seleccionados cuenten con los nutrientes necesarios para un buen desempeño en las actividades escolares.
Es muy importante que podamos ofrecer a nuestra familia una gran variedad de alimentos, que les aporten todos los nutrientes clave para seguir estando bien.
“En la actualidad estamos viviendo tiempos diferentes, que nos han cambiado la rutina de nuestras actividades, incluido el inicio de clases; sin embargo, también
ha sido un momento en el que vemos a más familias unidas compartiendo esos espacios que por el trabajo o el estudio dejamos de lado”, afirma Ana Silvia
González, gerente senior de Wellbeing y Asuntos Regulatorios de Kellogg Latinoamérica.
Buenos días, desayunos completos
Un buen día puede iniciarse con un delicioso desayuno, al ser la primera comida del día, se recomienda que sea completo combinando grupos de alimentos como puede ser cereal, leche y fruta. Esta combinación nos brinda energía, proteína y nutrientes como vitaminas y minerales que son esenciales en el mantenimiento de las funciones de nuestro cuerpo.
En una revisión de más de 22 estudios acerca del consumo del cereal publicado por The American Dietetic Association, sugiere que desayunar puede ayudar a los
niños en un mejor desempeño académico, en la memoria, las funciones psicosociales y el humor.
La importancia de los refrigerios
Más allá del desayuno, en los tiempos de descanso puede ser recomendable el consumo de un snack o refrigerio; sobre todo cuando el nivel de actividad de
nuestros pequeños en casa es alto. Esto también aplica a los jóvenes de secundaria o universitarios.
Sin duda los refrigerios pueden formar parte de una alimentación balanceada que ayuda a mantener los niveles de energía para las actividades académicas y
deportivas de nuestros hijos.