Una nueva pelea se está gestando al interior de la bancada del gobierno Petro, previo a las elecciones presidenciales del 2026: Benedetti y Saade.
La queja de no poder acceder a los vehículos de seguridad del exjefe de despacho y ahora precandidato presidencial Alfredo Saade en su llegada a Medellín fue el detonante que abriera esta nueva fractura en el gobierno.
Al conocerse el caso, el ministro del interior Armando Benedetti, señaló que Saade pide vehículos a la Unidad Nacional de Protección (UNP) como si “fuera una agencia de alquiler de carros” y enfatizó en que desde la Unidad Nacional de Protección no pueden enviarle carros de un momento a otro.
"¿Quién es Saade?, ¿Dígale que yo le pago el Uber?", fueron otras respuestas del ministro del interior frente a la queja el exfuncionario por coger taxi y no tener asignado una camioneta de seguridad.
La respuesta no cayó muy bien en Saade, quien no solo pidió respeto para él y los precandidatos presidenciales, sino que además le exigió renunciar.
“Si le quedó grande, renuncie. Le pido y le exijo respeto por los precandidatos a la presidencia, sea serio en sus respuestas porque no somos ningunos pendejos como usted nos trata”, señaló Saade.
Lea aquí: Piden carros como si fuera una agencia de alquiler: polémicas declaraciones de Benedetti
Aunque Benedetti afirmó que estaba en buenos términos con Saade luego de su salida del gobierno, lo cierto es que estas declaraciones dicen todo lo contrario y aumentan más las divisiones que se tienen al interior del partido político del gobierno.
Cada día se empiezan a conocer más incomodidad en la bancada contra Saade, recordando como varios integrantes del Pacto Histórico rechazaron su posición radical de buscar la reelección de Petro –pese a que la ley lo prohíbe- y de cerrar el Congreso.
En plena etapa preelectoral y a menos de un año de elegir el reemplazo de Petro en la Casa de Nariño, el partido de izquierda presenta más disputas entre sus integrantes que poco a poco lo están haciendo implosionar.
Además de la pelea con Saade, el partido también tiene la disputa con Daniel Quintero y sus críticas por ser precandidato en medio de los procesos judiciales que tiene en su contra luego de su polémico paso por la alcaldía de Medellín.
Gustavo Bolívar, otro de los precandidatos presidenciales, insiste en la salida del exalcalde de Medellín y hasta advierte que se negará a apoyar la candidatura de Quintero en caso de que este fuera el vencedor de la contienda interna.
Y si no fuera esto suficiente, el partido de izquierda aún busca definir que hacer para las elecciones presidenciales y la consulta interna para octubre, luego del fallo del Consejo Nacional Electoral que le cerró la puerta a sus intenciones de funcionar el Pacto Histórico, la Colombia Humana y Progresistas en un solo partido.
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