Un viaje imaginario por el fantástico mundo de la literatura infantil emprende los niños campesinos del municipio de Ocaña en el bibliobús que, recorre las veredas más apartadas, con el fin de promover el hábito de la lectura.
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En ese paseo los menores de edad descubren de una manera didáctica la trama, misterios, espacios exóticos, peripecias de los personajes ficticios y reales para estimular la comprensión lectora y así, acceder a los distintos campos del conocimiento humano, indica el secretario de Educación, Cultura y Turismo, Raúl Rolando Castro Ojeda.
Con lecturas en voz alta de mitos, fábulas, leyendas, historias, anécdotas y cuentos hacen más ameno el recorrido en la zona rural de Ocaña.
Muchos con cara de asombro por la sorpresiva aparición de un monstruo en medio de ese bosque de palabras, otros comiéndose las uñas debido a la ansiedad generada por conocer el desenlace de ese hilo narrativo. Emociones encontradas de alegría y tristeza por un final inesperado. Lo más importante que los niños campesinos aprenden muchos valores éticos y morales sobre ruedas, recalca el funcionario.
La ruta contempla la cobertura en toda la zona rural de Ocaña con una agenda cultural importante para inculcar las manifestaciones artísticas entre la población infantil.
La secretaría de Educación, Cultura y Turismo propicia espacios inclusivos y culturales mediante estrategias para fomentar la lectura, escritura y el arte en los niños, niñas y adolescentes del municipio a través del Bibliobús.
El vehículo del saber cuenta con colecciones especiales y herramientas pedagógicas que contribuyen con su proceso de aprendizaje, señala el secretario de Educación, Cultura y Turismo, Raúl Rolando Castro Ojeda.