Los rastros que la Policía de Norte de Santander obtuvo sobre Jhon Jairo Martínez Flórez, señalado de ser un presunto violador en la zona rural de Labateca, fueron fundamentales para poder judicializarlo y capturarlo para que responda por estos hechos, que se venían registrando desde octubre del año pasado.

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El detenido, de 21 años, es señalado de raptar niñas y mujeres y de violar a una menor de 14 años, el pasado 8 de septiembre, en la vereda El Resguardo, de este municipio de Norte de Santander.

Según se conoció, el agresor siempre llegaba a las viviendas de las víctimas y aseguraba ser miembro del Ejército de Liberación Nacional (Eln), para intimidar a las personas y así lograr su objetivo de raptar a una menor de edad.

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“Él siempre hablaba en plural, asegurándoles a las personas que estaban rodeadas por miembros de esta organización. Encerraba a las familias en una habitación y así se llevaba a la víctima hacia una zona boscosa”, explicó una fuente judicial cercana a las pesquisas.

La noche del 8 de septiembre, Martínez se llevó a una niña de manera forzosa para agredirla sexualmente en la vereda El Resguardo.

La comunidad de este sector de Labateca encendió las alarmas y alertó a la Policía sobre lo que había ocurrido, por lo que se iniciaron las pesquisas para identificarlo y seguirle los pasos al autor del hecho.

Sin embargo, dos días después, mientras una familia celebraba el 15 años de una de sus integrantes, ocurrió otro rapto de una mujer, lo que les indicó a las autoridades que se trataba de la misma persona a la que estaban buscando.

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Precisamente, en uno de estos hechos, el papá de una de las víctimas corrió detrás del abusador, mientras pedía ayuda a los habitantes de esta zona rural y así empezaron a cercar los movimientos del responsable de estos hechos.

Los habitantes de Labateca alertaron a la Policía de que el presunto violador se movilizaba en un carro hacia Toledo, por lo que los uniformados lo interceptaron y lo identificaron plenamente, mientras continuaban las pesquisas.

Wilden Fabián Capacho, alcalde de Labateca, rechazó y lamentó los hechos ocurridos en este municipio, con las niñas y las mujeres.

“Levantamos nuestra voz de rechazo por la dignidad de nuestras niñas, adolescentes y mujeres de Labateca”, insistió el funcionario.

Además, el dirigente precisó en ese momento, que a pesar de que la Policía había detenido al presunto responsable el día del suceso más reciente, tuvo que dejarlo libre por la falta de una orden judicial en su contra.

Por eso, un grupo de uniformados se desplazó a Labateca para recolectar las denuncias de las víctimas y así fortalecer el proceso judicial que permitió que el Juzgado Promiscuo Municipal de Pamplona expidiera una orden de captura contra Martínez, por los delitos de acceso carnal violento y secuestro simple.

En medio de las investigaciones, las autoridades conocieron que, en uno de los casos denunciados, el agresor le exigió al papá de la menor de edad $500.000 a cambio de no llevarse a su hija con rumbo desconocido.

“El señor le dijo que solo podía darle $200.000, pero este hombre (Jhon Jairo Martínez) le dijo que eso no le servía para nada y que entonces tendría que secuestrar a su hija, por lo que el papá finalmente accedió a darle el restante”, dijo una fuente judicial.

La captura

Unidades de la Sijín llegaron el viernes 16 de septiembre hasta la vivienda del presunto violador, en la vereda El Resguardo, donde lo detuvieron y le notificaron la orden judicial por la que era buscado.

El detenido quedó a disposición de la Fiscalía y luego de ser presentado en audiencias de legalización de captura, imputación de cargos  y medida de aseguramiento, un juez decidió enviarlo a la cárcel.

“Estamos actuando de forma contundente contra los delitos sexuales que afectan a los niños y adolescentes en Norte de Santander”, dijo el coronel John Chavarro, comandante de la Policía del departamento.

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