Adrián Sánchez Durán, alias Zarco o Yosue, pensó que sometiéndose a la justicia obtendría un trato especial y podría evadir las cuentas pendientes que tenía con las autoridades, pero no fue así, pues tan pronto supieron que el hombre tenía una orden de captura vigente por concierto para delinquir con fines extorsivos y secuestro, extorsión agravada y secuestro extorsivo, no dudaron en hacerla efectiva y ponerlo tras las rejas.

Y es que todo el conflicto armado que vive el Catatumbo obligó a que Zarco buscara salvaguardar su vida entregándose a las autoridades porque el hombre fungiría como el segundo cabecilla de la Columna Móvil Negro Eliécer del Frente 33 de la disidencia de las Farc.

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Sin embargo, nunca imaginó que ya lo tenían más que ‘pillado’ por su presunto accionar criminal en municipios como Ocaña, Ábrego, Convención y La Playa de Belén.

La investigación

Desde enero del año pasado, Zarco empezó a aparecer en el radar de la Policía de Norte de Santander por el aumento de las extorsiones a comerciantes y transportistas en los municipios anteriormente mencionados.

Declaraciones juramentadas, reconocimientos bibliográficos, pruebas, entrevistas a víctimas y denuncias, fueron cruciales para que se le diera apertura a una investigación en su contra.

Desde entonces, las autoridades buscaban recopilar todo el material probatorio que les permitiera solicitar una orden de captura.

A medida que las indagaciones avanzaban, el 20 de agosto de ese mismo año, se dio a conocer la retención por varias horas de Eligio Jiménez Peñaranda y el secuestro de su esposa, la abogada Likey Guerrero Galeano, en Ocaña.

En ese momento, los investigadores tenían claro que Sánchez Durán estaría detrás de ese hecho.

Aunque la mujer fue liberada el 28 de octubre de 2024, la investigación no paró ahí. No fue sino hasta este año que se emanó una orden judicial en su contra, tras encontrar las pruebas suficientes de su presunta participación en el secuestro, entre otras actividades delictivas como la extorsión al comercio y transporte.

El Juzgado Segundo Penal Municipal de Control de Garantías Ambulante de Cúcuta ordenó, el 5 de febrero, su captura inmediata.

Sin embargo, las autoridades desconocían sobre el paradero de Zarco así que desplegaron varias unidades para tratar de ubicarlo.

Sometido a la justicia

Estando en el proceso de sometimiento a la justicia, la policía judicial del Grupo Investigativo de Delitos contra la Seguridad Pública y el Terrorismo de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol (Dijín) en coordinación con el grupo BADRA 7 del Ejército Nacional, ejecutaron la orden de captura que Adrián Sánchez tenía pendiente por los delitos de concierto para delinquir con fines extorsivos y secuestro, extorsión agravada y secuestro extorsivo.

Su detención se llevó a cabo el 20 de febrero del presente año en las instalaciones del Cantón Militar El Trapiche de Ocaña.

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El hombre fue presentado a la Fiscalía y luego de ser escuchado en las audiencias públicas, un juez decidió dictarle medida de aseguramiento de detención preventiva en establecimiento de reclusión.

El secuestro de una abogada

Eran las 4:30 de la tarde del 20 de agosto del año pasado cuando Eligio Jiménez y su esposa Likey Guerrero se reunieron con dos hombres para concretar la hipoteca de una casa de campo en Valledupar.

Las personas que acompañaban a la pareja, les pidieron que se trasladaran junto con ellos hasta el municipio de La Playa de Belén en donde se encontrarían con otro hombre, con el que realmente realizarían el negocio. Y así lo hicieron.

Sin embargo, cuando se movilizaban por el sector de Los Pinos, hombres armados atravesaron otro vehículo y bajaron Likey para llevársela con rumbo desconocido.

Aunque a Eligio lo retuvieron por varias horas en el corregimiento Aspasica, más tarde lo regresaron a Ocaña.

Los días siguientes al hombre le solicitaban una gran suma de dinero para regresar sana y salva a su compañera sentimental.

No fue sino hasta el 28 de octubre de 2024 que la entregaron a una comisión humanitaria que lideró la Defensoría del Pueblo Regional de Ocaña.

La investigación pudo establecer que le hoy capturado habría hecho parte del secuestro pues se encontraba en el sitio donde la tuvieron retenida por más de dos meses.

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