En las calles de Cúcuta, emerge una voz con fuerza y pasión inigualables. Yeison Orley Carrillo Jaimes, ‘Rip Orley’, es un rapero urbano que durante los últimos tres años, labró su camino en la música.
A sus 34 años, no solo enfrenta los desafíos de una carrera, sino también los obstáculos personales que la vida le presenta.
Nacido en la capital nortesantandereana, una ciudad que lamentablemente es asediada por la violencia y los homicidios, Yeison canalizó sus experiencias y su amor por su tierra natal en su más reciente sencillo ‘Mi corazón no lo entiende’. Aunque esta canción toca temas de amor y romance, también es un grito de auxilio por Cúcuta y Colombia, reflejando la dura realidad que enfrentan sus habitantes.
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“Lastimosamente Cúcuta, que es mi tierra, se complicó con los homicidios. Lo único que yo quisiera hacer con mi talento es ayudar y de pronto llegar a salvar algunas vidas. Ese sería el triunfo más grande en mi carrera”, comentó ‘Rip Orley’ con una esperanza inquebrantable en su voz.
A lo largo de su carrera, Carrillo Jaimes ha escrito 34 canciones, pero solo ha podido grabar cuatro de ellas. Entre sus obras más destacadas se encuentran ‘Lágrimas Negras’, ‘Quién te Soñara’ y su nuevo sencillo ‘Mi corazón no lo entiende’. Cada una de sus canciones es una pieza de su alma, reflejando sus vivencias y las de sus amigos, llenas de poesía, drama y versos.
Sin embargo, el camino de Yeison no ha sido fácil. Un accidente le dejó una discapacidad en la mano izquierda, perdiendo un dedo y parte de la movilidad. Este trágico evento complicó su capacidad para conseguir un empleo en una empresa formal, obligándolo a buscar otras formas de ganarse la vida.
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Además de su pasión por la música, el rapero cucuteño se dedica a reciclar y vender ropa, buscando el sustento diario en cualquier oportunidad que se le presente. “La verdad, no tengo apoyo de nadie. A veces nos toca trabajar en lo que salga para cumplir nuestros sueños. Con humildad, yo sé que tengo talento, por eso lucho tanto, para lograr mis metas”, afirmó con determinación.
La vida de este artista es un testimonio de resiliencia y perseverancia. A pesar de los desafíos y las limitaciones, su pasión por la música sigue siendo su faro en medio de la adversidad. “Hay muchas personas que me dicen que tengo mucho talento, cantantes emergentes y reconocidos de la ciudad también han reconocido mi destreza musical, entonces por esas personas sigo luchando, por mis sueños de llegar a lo más alto”, expresó.
El nortesantandereano no se conforma con las tendencias actuales de la música urbana que glorifican el sexo y la superficialidad. Sus canciones son un refugio para quienes buscan profundidad y sinceridad en las letras. Para él, la música es una forma de poesía, una manera de expresar el drama y las realidades de la vida cotidiana. Su rechazo a las letras vacías y su compromiso con un contenido más significativo lo distinguen en un panorama musical saturado de banalidades.
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El impacto de ‘Rip Orley’ no se mide solo en términos de popularidad o ventas, sino en la capacidad de su música para resonar en los corazones de aquellos que lo escuchan. Su deseo de usar su talento para hacer el bien y posiblemente salvar vidas es un reflejo de su carácter y su amor por su comunidad.
En un mundo donde la violencia y la desesperanza pueden parecer abrumadoras, la música de Yeison Carrillo ofrece un rayo de esperanza y una promesa de que, con determinación y pasión, los sueños pueden hacerse realidad. Con cada verso y cada nota, clama no solo por su tierra natal, sino por un mundo mejor, uno donde el arte y la humanidad prevalezcan sobre la violencia y el desamor.
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