Cúcuta y su área metropolitana lideran en el país el Índice de Confianza del Consumidor (ICC), cuya cifra se ubicó en 46,2% en la Encuesta Pulso Social (EPS) elaborada por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) y que corresponde a junio de 2022.
La capital de Norte de Santander figura en la tabla por encima de Neiva (43,6%) y de Ibagué (42,6%). Mientras que otras capitales como Bucaramanga y Bogotá ocupan los lugares 10 y 16, con 37,6% y 33,9%, respectivamente.
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Al preguntársele a Juan Daniel Oviedo, director del DANE, por qué Cúcuta tiene ese Índice de Confianza, pese a ser la ciudad con la inflación más alta (13,65%) y ser la segunda en informalidad (65,2%), dijo a La Opinión que este territorio fue muy pesimista, en años anteriores, frente a cómo los hogares veían su situación económica hoy que hace 12 meses, pero a comienzos de 2022 comenzó a caer drásticamente ese sentimiento.
Expresó que el optimismo ha ido creciendo por las expectativas que genera la reapertura de la frontera y de las relaciones con Venezuela.
“Los hogares en Cúcuta, casi tres cuartas partes de ellos, consideran que la situación económica será mejor o mucho mejor en los próximos 12 meses”.
El director del DANE también destacó que diferentes políticas públicas de carácter local están llevando a que continuamente haya casi tres veces más optimismo frente a la mejora de la situación económica durante el próximo año, que en el promedio de las 23 ciudades del país.
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“Los habitantes en Cúcuta están viendo menos limitadas sus posibilidades de acceder a artículos de primera necesidad, que aplica al 41,7%; y, adicionalmente, estamos viendo que hemos disminuido drásticamente la proporción de hogares que no tienen ingresos como consecuencia de la pandemia”.