Mientras haya incertidumbre interna y externa, el Banco de la República será prudente en la reducción de la tasa de interés de la política monetaria, lo cual disminuyó a 9,25% el miércoles pasado.
El manejo cauteloso del costo del dinero tiene dos caras: proteger la capacidad adquisitiva de los colombianos, y en especial de los más vulnerables; y hacer que las inversiones y el consumo se aplacen.
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Pero llega un punto en que muchas empresas y personas no pueden continuar con el uso de un activo, como los automotores, y deben tomar la decisión de su renovación. Ante las altas tasas de interés, ¿qué hacer?
Las empresas agremiadas en la Asociación de Concesionarios de Automotores (Aconauto) ofrecen varias alternativas viables para que estrenar vehículo no sea una carga traumática para las familias que buscan tener uno o las compañías.
La flexibilidad es clave
De acuerdo con el análisis de Aconauto, una de las formas que el crédito tradicional permite ser utilizado en la compra de vehículos con tasas de interés altas es acudir a la creatividad de los financieros enfocada en la flexibilidad, tanto de la tasa pactada como de las cuotas, según el flujo de caja del interesado.
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“Así hay infinidad de posibilidades, pero una de las más usadas es facilitar el acceso mediante una cuota inicial baja, digamos 10%, lograr cuotas mensuales también bajas mediante el financiamiento del 50% del valor del vehículo a 60 meses y el 40% restante se utiliza como la cuota inicial de nuevo vehículo al término de ese lustro”, indicó el gremio.
Leasing y renting
La asociación explicó que, tanto el leasing financiero como el renting operativo, son modalidades de tenencia de vehículos en las que el interesado evita el costo de la propiedad del automotor y solamente paga por el uso.
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“En estas modalidades se destaca que el capital que implica la compra no se usa y queda libre para invertirlo en proyectos productivos propios de la actividad de las empresas o, por qué no, para emplearlo en asuntos domésticos o familiares”, señaló Aconauto.
Ambos tienen el beneficio adicional de que el suscriptor de este servicio de arrendamiento del vehículo paga un canon mensual que es deducible de los impuestos.
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