Cayó el telón del Segundo Festival de Teatro por la Paz y la Reconciliación del Catatumbo organizado por la Corporación artística y cultural Sueños Abiertos con el fin de restituir el tejido social en la provincia de Ocaña.
“El objetivo fundamental fue sensibilizar a la gente a través del arte y la cultura para lograr la convivencia pacífica de los pueblos”, señaló el coordinador del evento, Diego Fernando Quintero Ascanio quien resalta el potencial existente en una zona convulsionada por la violencia.
El especialista en artes dramáticas, Juan Carlos Manzano Carrascal destacó la puesta en escena de episodios para mitigar la barbarie y sanar las penas de una población que se debate entre la vida y la muerte. “Las expresiones artísticas se constituyen en esa fuerza catalizadora para reparar el daño ocasionado a la sociedad. Es una dosis positiva que se debe inyectar a las futuras generaciones”, dijo.
Participaron en la segunda versión 12 colectivos de talla nacional y regional con el firme propósito de rescatar los principios éticos y morales con una formación integral entre niños, jóvenes y adultos. La iniciativa contó con el respaldo del Ministerio de las Culturas, las Artes y los Saberes a través del Plan de Concertación Nacional, Cámara de Comercio, las alcaldías de Ocaña y la Playa de Belén y empresarios de la región.
“Realizar un festival de teatro por la paz en el Catatumbo colombiano es crucial, ya que promueve la cohesión social y el sentido de comunidad al reunir a personas de diferentes sectores para reflexionar sobre la convivencia pacífica de los pueblos”, indicó el director artístico de Ocaña Talent, Johan Moncada.
Señaló que este tipo de eventos sirven como plataforma para dar voz a las experiencias locales a nivel nacional. Además de que su trascendencia radica en contribuir a la construcción de la paz y reconciliación en la región, generando oportunidades económicas para artistas y fomentando el desarrollo cultural y turístico.
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Destacó además, la manera como el festival impactó positivamente en la sociedad al promover valores de convivencia pacífica y resiliencia, fundamentales, demostrando el poder del arte y la cultura como agentes de transformación social.