La Alcaldía de Cúcuta desde su Secretaría de Posconflicto y Cultura de Paz implementará la estrategia “1, 2, 3 por la Paz Fronteriza” en dos de los corregimientos que han sido afectados por el conflicto armado: Banco de Arena y Palmarito,  atendiendo a la alerta temprana 035 de 2020, la cual señala el “incremento de situaciones en las que las niñas, niños y adolescentes son tentados por los grupos armados para hacer 'vueltas' o trabajar”.

El objetivo de la propuesta es mitigar el riesgo de reclutamiento, uso, utilización y violencia sexual contra niños y adolescentes por parte de grupos armados organizados al margen de la ley y grupos delincuenciales organizados. 

Por tal motivo, se promoverán escenarios de paz que permitan mejorar las condiciones de protección para estas poblaciones desde los núcleos familiares y el desarrollo del cuidado, autocuidado y autoprotección de los menores. 

Elisa Montoya Obregón, secretaria de Posconflicto y Cultura de Paz, explicó que esta estrategia tiene un enfoque completamente territorial.

Inicialmente se capacitarán a padres de familia en las rutas para la prevención de los niños y adolescentes, lo cual posibilitará generar entornos protectores. Posteriormente, se implementará un proceso formativo a través de talleres lúdico-pedagógicos coordinados por un equipo interdisciplinario, para empoderar a los menores sobre sus derechos.

“Va a ser desarrollada directamente en el territorio. Cada uno de los corregimientos tendrá una visita semanal durante 4 meses para desarrollar todos los talleres de autoprotección, de autocuidado, de prevención e identificar todos los tipos de riesgos a los que los niños, niñas y adolescentes se ven expuestos en este contexto de conflicto armado que es tan complejo en esta zona”, detalló la funcionaria.

La estrategia se ejecutará entre junio y septiembre de 2021.  Martha Cadena, coordinadora de la estrategia "1,2,3 por la Paz Fronteriza", mencionó que, esta involucrará a 100 niños, niñas, niñas y adolescentes,  padres de familia, líderes sociales y juveniles de ambos  corregimientos, permitiendo dar cumplimiento al Acuerdo de Paz mediante el avance en las  garantías de no repetición.

Adam Muñoz Ruiz, profesional especializado de la estrategia, señaló que, con esta  también apoyarán a las comunidades en la resolución de conflictos familiares y comunitarios que se presentan en el día a día , "fortaleciendo a las poblaciones que han sido víctimas del conflicto armado". 

Otras intervenciones 

Montoya detalló que para la zona rural se vienen adelantando otras intervenciones por parte de la administración municipal.

Explicó que, la Secretaría de Gestión del Riesgo de Desastres está haciendo el dragado de unos canales “para evitar precisamente la inundación de los centros poblados y las salidas de estos canales de lluvias”.

Asimismo, informó que la Secretaría de Infraestructura ha priorizado vías terciarias tanto del corregimiento Banco de Arena como Palmarito, y “en toda la vía secundaria que vamos a hacer con la Gobernación y que se ha priorizado para hacer una placa huella e ir superando esta brecha en materia de infraestructura”.

Mientras que la Secretaría de Desarrollo Social y Económico viene adelantados dos proyectos; uno en Palmarito donde se está construyendo un salón multipropósito para desarrollar actividades culturales y comunales. Será construido en la vereda El Suspiro.

La segunda intervención está relacionada con el fortalecimiento de las Juntas de Acción Comunal (JAC) de los dos corregimientos, “a quienes se les está dotando de computadores y estamos llevando redes de tecnología con la Oficina TIC para potencializar el tema del internet y que, de esta manera, las JAC puedan tener un rol más activo en cuanto a la protección y la defensa de sus comunidades”, agregó la secretaria.

'Entornos Protectores de Paz' y otros proyectos 

Con esta estrategia se brinda no solo un acompañamiento a las comunidades de la zona rural, sino también una disminución de las brechas entre lo urbano y lo rural.

Se hace un seguimiento y monitoreo continuo a todas las situaciones, no solo a las del conflicto. “Viernes tras viernes estamos con los corregimientos, estamos en los territorios atendiendo a las personas con diferente oferta institucional, con salud, con Sisbén, con el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, con el Sena (Servicio Nacional de Aprendizaje),  con el servicio la Registraduría”, explicó Montoya.

La secretaria de Posconflicto y Cultura de Paz afirmó que, en articulación con la Alcaldía de Cúcuta también vienen adelantando una serie de proyectos que tienen relación con iniciativas productivas de tipo colectivo.

“Estamos apoyando tres proyectos en este momento en Palmarito y Banco de arena. El primero es Asocapal (Asociación de Cacaoteros de Palmarito), el segundo es la Cooperativa El Fénix, un proyecto de caña de azúcar que tiene 36 asociados en su mayoría víctimas del conflicto armado, al igual que Asocapal y, finalmente el proyecto de la Asociación de Citricultores de Banco de Arena que tiene 23 asociados que está enfocado hacia el mango Tommy”, agregó Montoya.

Aseguró que, con el proyecto de la Asociación de Citricultores se tienen dos fases muy importantes: una relacionada al tema de la asistencia técnica, la capacitación para los asociados y la entrega de insumos, maquinaria y materias primas.

La segunda fase corresponde al acompañamiento para la verificación de la continuidad y para darle supervivencia estas iniciativas productivas.

La funcionaria anunció que, en las próximas horas estarán lanzando la nueva convocatoria de ‘Asociaciones rurales con un enfoque agropecuario y agroindustrial’, para “nuevamente seguir dando un apoyo a los campesinos de la zona rural y en ese sentido, la convocatoria irá destinada a todos los corregimientos con un énfasis especial en territorios afectados por la violencia”.

Acuerdos de Paz 

Con respecto a los avances en el cumplimiento de los Acuerdos de Paz, Montoya recalcó que hay dos cosas muy importantes que mencionar, una relacionada con el apoyo a las personas en proceso de reincorporación y reintegración, “que es uno de los indicadores que tenemos en el Plan de Desarrollo y esos indicadores en el sentido de las personas en proceso de reincorporación ya fueron cumplidos a su máximo 100%”.

En segundo lugar, con respecto a la solución del problema de las drogas ilícitas, con la Alcaldía de Cúcuta están desarrollando un plan piloto de sustitución voluntaria de cultivos ilícitos con familias de Banco de Arena en donde se van a beneficiar 35 hogares que tienen un enfoque territorial y no un enfoque familiar, porque el “proyecto se va a desarrollar con una vereda de Banco de Arena completa y no solamente con aquellas familias que tienen entre sus parcelas o entre las parcelas en las que viven, cultivos ilícitos”.

El proyecto tiene un costo de $1.700 billones y se va a desarrollar desde este año 2021 hasta marzo del 2023, es decir que tiene una duración aproximada de 22 a 25 meses, con el objetivo de que sea una estrategia sostenible.

Este contará con 4 fases, la primera y la más importante, la asistencia técnica integral para el desarrollo de un proyecto productivo que va a ser general dentro de todo el territorio.

La segunda, las transferencias condicionadas que van a brindar o garantizar la seguridad alimentaria de las familias.  “Desde la Alcaldía de Cúcuta se realizarán una serie de transferencias mensuales para estas familias, para garantizar el cumplimiento de los acuerdos que se están generando y así mismo pues para poder darle un tiempo a que el proyecto productivo de unos frutos”.

En tercer lugar, estará la implementación del proyecto productivo, “el proyecto que va a venir a reemplazar la coca en este caso y es un proyecto que tiene pues insumos, maquinarias materias primas, acompañamiento de profesionales, asistencia técnica completa con ellos, con toda la familia y como un último, pero no menos importante  componente tenemos el tema del monitoreo y el acompañamiento para saber si hay resiembra”, detalló Montoya.

“Es muy importante resaltar que las iniciativas que se vienen adelantando contra el reclutamiento de menores en la zona rural de Cúcuta han dejado buenos resultados. En primer lugar, porque hemos podido desactivar de manera urgente y de manera temprana unos riesgos, hemos podido brindar evacuación del territorio de dos menores de edad que estuvieron pues en la mira de diferentes grupos armados al margen de la ley y en segundo lugar hemos tejido unas redes de confianza muy importantes con la comunidad y con los mismos jóvenes”, manifestó Montoya.

La secretaria señaló que, aunque aún falta mucho por hacer, las iniciativas contra el reclutamiento de menores si han tenido buenos resultados en la zona rural de Cúcuta y para continuar en la misma línea, ahora trabajarán en la estrategia “1, 2, 3 por la Paz Fronteriza”.