“Renové energías, vengo con más ilusión que antes y a dar lo mejor. Creo que las oportunidades no hay que dejarlas pasar y otra vez se me da una oportunidad acá, espero cerrar el año con el ascenso”, afirmó Jhonathan Agudelo, el pasado julio, tras firmar con el Cúcuta Deportivo luego de un temporada en el fútbol de Tailandia.
El antioqueño volvió a mitad de año al equipo donde mejor le ha ido en su carrera. Lo hizo para vivir su tercer ciclo, puesto que se enfundó la rojinegra por primera vez entre 2017 y 2019, y tuvo otro episodio más entre 2022 y 2024.
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El retorno tuvo un término dramático, pero feliz. En la final ante Real Cundinamarca, el pasado 2 de diciembre en el estadio General Santander, el paisa anotó el gol del empate del marcador global pescando un rebote y con derecha la envió al fondo sobre el 53’.
Minutos después, Agudelo tuvo un penal que, de convertirlo, ascendía al rojinegro parcialmente. El atacante tomó impulso, disparó intentándola cruzar, pero se atravesó una mano cambiada del destacado arquero Kevin Cataño.