Las recientes cifras de empleo en Colombia, nos indican que existen 2,41 millones de colombianos desocupados, lo que nos lleva a señalar que es importante trabajar en la dirección de crear con urgencia nuevas plazas que permitan una ocupación mayor, de tal manera que sea posible aliviar la carga a muchas personas que se encuentran sin ingreso para ellos y para sus familiar; y de otro lado, poder atenuar también el problema social que se desprende de la desesperación, para muchos, de no estar en condiciones de subsistir.
Aquí es en donde es necesario crear fuentes de crecimiento para la actividad económica,de tal manera que sea posible ampliar el quehacer. La prosperidad va acompañada de mayores requerimientos para poderla asumir y allí es cuando la ocupación encuentra espacios.
Si miramos el panorama de hoy, encontramos que es necesario reforzar varios frentes: En primer lugar, el sector de la construcción, al que ya nos hemos referido en esta columna y que experimenta caídas que llegan al 50%, generándose allí un hueco enorme para el trabajo en el espacio de la mano de obra no calificada.
Y junto a éste, está el de las obras públicas, pues existen muchos macroproyectos que han experimentado demoras y que tanto los ministerios respectivos, como muchas regiones, no han estado en capacidad de impulsar con la dinámica que se requiere, comprobándose bajas ejecuciones presupuestales, lo que indica que estando la plata, ésta no ha estado a disposición del impulso de los proyectos, en donde hay muchos motivos que es necesario analizar con urgencia para poderlos purgar de manera rápida.
Y por otro lado, la inversión extranjera en Colombia; aquella que indica la llegada de capitales para aplicarlos a proyectos de inversión; ésta ha tenido una caída del 4,7% en el primer semestre de este año, lo que hace pensar en generar mecanismos de mayor confianza, que permitan a los inversionistas desarrollar proyectos que se asociación de manera inmediata a la generación de empleo.
Y debe anotarse también, que la inversión privada se ha desplomado un 24% en los reportes del Dane a junio de este año, lo que implica que el capital local, no está encontrando alternativas de inversión y muy seguramente, o ha aplazado sus inversiones, o las están haciendo en otro país, lo que urge establecer las causas lo más pronto posible, para que se puedan rectificar los indicadores y veamos el reflejo en las cifras del crecimiento económico y su repercusión consecuente en el empleo.
Las acciones que se lleguen a tomar frente a estosaspectos tienen que tener equipos muy definidos, con metas de corto plazo, que permitan enderezar el rumbo y aliviar la situación social de esta inmensa cantidad de colombianos que aguardan alternativas para desarrollar sus vidas.
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