En mal momento, en opinión de muchos liberales, auténticos como tal, se le entregó a usted doctor Gaviria, la conducción del partido. En lo inmediato, se evidenció la equivocación, la pasada Consulta, lejos de favorecer al partido, usted doctor Gaviria, con su actitud autócrata y sesgada, originó un sisma, avasallando y atropellando, se impuso en su pretensión de desconocer líderes con reconocida trayectoria en el partido, figuras que enaltecen y no nos avergüenzan.
Postura, la suya doctor Gaviria, que riñe con el ideario partidista, ¿a quién usted doctor Gaviria, le está haciendo el mandado?
Poco se diferencia su estilo, al del doctor Uribe Vélez, que triste y extraña coincidencia. Acá vale detenernos en algunos pasajes de su vida política, doctor Gaviria. A la sombra de un reconocido dirigente liberal, conocido como “El Plumón Vélez”, inicia su actividad política en el departamento de Risaralda, ocupa usted doctor Gaviria dignidades y se proyecta nacionalmente. Una vez logra figuración, se aleja de su tutor, se comenta que usted doctor Gaviria le traicionó. En estas circunstancias pretende ingresar al congreso, y es derrotado, se le cobra su deslealtad. A los pocos días, del magnicidio del doctor Galán Sarmiento, medra al llamado Galanismo, y uno de sus hijos, del inmolado, le señala a usted como el sucesor, de su padre, entregándole su legado. Comentarios diversos surgen ante este acontecimiento.
Usted doctor Gaviria, sin vergüenza y ningún recato desconoce a los líderes históricos del llamado Galanismo y en actitud oportunista ante la solidaridad del país, ante el crimen es usted elegido presidente de los colombianos. Su gestión como gobernante, es altamente cuestionada. Impuso una política neoliberal apartándose de la social-democracia, que es el fundamento ideológico de nuestra organización partidista, su slogan de “BIENVENIDOS AL FUTURO”, se traduce en un país ensombrecido, recordamos la terrible crisis eléctrica, como liberal usted doctor Gaviria, es poco lo que aporta al país, lo que genera cuestionamiento a la causa liberal. Desde este panorama, le haría un bien usted al partido, marginándose de su conducción. Esto que se le agradecería inmensamente.
Su pretensión de desconocer a liberales de verdad que enaltecen al partido, tal es el caso del doctor Juan Fernando Cristo Bustos, quien ante el crimen de su padre, asume su legado, y se destaca como parlamentario y ministro de estado, su figura gallarda y activa no concuerda con su menosprecio doctor Gaviria. El doctor Cristo Bustos es entre otras cosas, Gestor de Ley de las Victimas y Restitución de Tierras, hecho avalado con la presencia del entonces Secretario General de la ONU, elemento fundamental en las negociaciones en la Habana con la insurgencia, que nos conduce a la paz para la martirizada Colombia. Ajeno a la corrupción que tanto daño y descrédito causa a la política y al país ha sido el doctor Cristo Bustos. En el colmo de su mezquindad doctor Gaviria, pretendió usted, torpedear el aval del doctor Andrés Cristo Bustos en su aspiración al senado de la república; tamaño despropósito, es a todas luces, condenable y antiliberal. De ser usted católico, doctor Gaviria, y afortunadamente no Cristista, es hora de que reflexione y no propicie descalabros en nuestro partido.
Conscientes de que hay mucho más liberalismo que partido, la contienda próxima a elegir el congreso de la república nos es favorable. Independientemente de su posición torticera, y si por el contrario, el partido el partido sale lastimado, es usted doctor Gaviria, el absoluto responsable, como lo fue del fracaso en el que se le encomendó el pasado plebiscito. Usted doctor De La Calle, descontamínese del Gavirismo en la seguridad que mucho mejor le va.
