En el escenario nacional desde el mes de noviembre ha tomado fuerza la lucha entre el Grupo Gilinski y el Grupo Empresarial Antioqueño (GEA). Con base en los informes conocidos el banquero Carlos Gilinski presentó la OPA (Oferta Pública de Adquisición), con el objetivo de quedarse con buena parte del Grupo Empresarial Antioqueño (GEA).
Con las ofertas de adquisición, lo que se ha considerado el ataque bursátil más agresivo de la Bolsa de Valores de Colombia, el grupo Gilinski logró quedarse con 25.44 por ciento de las acciones de Sura y el 27.89 por ciento de las acciones de Nutresa. Aunque no era lo esperado, esto le permite al oferente llegar a la dirección de las dos empresas y muy probablemente de Bancolombia.
En 1987 Carlos Gilinski regresó a Colombia convirtiéndose en uno de los banqueros más importantes del país y en 2013 ingresó a la lista millonaria de la revista Forbes. Hoy es uno de los hombres más ricos de Colombia con un patrimonio de 4.400 millones de dólares y acaba de penetrar en lo que por muchos años se conoció como el Sindicato Antioqueño.
Vale recordar que la lucha de poderes entre el Grupo Empresarial Antioqueño y Gilinski es de más de 20 años. En mayo de 2006 terminó la disputa que sostenían desde hacía 8 años por la negociación de compra-venta de Bancolombia. Allí al caleño Gilinski no le fue tan bien.
Pero ahora en su deseo de quedarse con Bancolombia, el banco más grande del país, Gilinski cuenta con el respaldo de la familia real de Abudabi. El grupo Sura tiene el 46.1 por ciento de Bancolombia, lo que facilita el objetivo.
El Grupo Empresarial Antioqueño, quizá el conglomerado donde más importa e influye la tradición, enfrenta una dura prueba. Hace unos días en entrevistas con diferentes medios el alcalde de Medellín , Daniel Quintero, calificó al GEA como “unos carteles, unas mafias que son expertos en tomarse el control irregular de empresas públicas y privadas y un grupo de personas que estaba gobernando Medellín desde sus escritorios”.
Estas coincidencias de acciones negativas son indudablemente un duro golpe para tan importante grupo de empresarios y una oportunidad para demostrar su experiencia en la aplicación de estrategias para superar tan difíciles pruebas.
