Comunidades indígenas del departamento del Cauca, iniciaron un bloqueo en la carretera que conecta a Cali con el departamento del Cauca, como forma de protesta en el kilómetro 27 de la vía Panamericana, con el objetivo de presionar al Gobierno nacional para que se les otorguen más tierras y se atienda sus demandas históricas.
El bloqueo, que se encuentra en jurisdicción del corregimiento de Tunía, municipio de Piendamó, ha llevado a los manifestantes a tomar medidas drásticas para hacer escuchar su voz. Los indígenas han detenido a camiones en la carretera, forzándolos a detenerse y posteriormente pinchándoles los neumáticos.
Además, la comunidad indígena ha dirigido su protesta hacia el Consorcio Nuevo Cauca, encargado de construir la doble calzada en la zona. Han obligado a los operarios a suspender sus labores, bajo amenaza de quemar la maquinaria utilizada en la construcción.
Estas acciones han generado un fuerte impacto en la movilidad y el transporte de la región, afectando a conductores y empresas que transitan por la vía Panamericana.
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Hace un mes también se presentaron bloqueos en la vía Panamericana, específicamente en los puntos del sector El Cairo en Cajibío, donde comunidades campesinas protagonizaron las protestas, y en La María, Piendamó, donde indígenas del pueblo Misak también participaron en las manifestaciones.
Estos bloqueos anteriores muestran la persistencia de las demandas de tierras por parte de diferentes comunidades en la región del Cauca. Las protestas han sido una forma de expresar su descontento y buscar que el Gobierno nacional atienda sus necesidades históricas.
La situación se suma al actual bloqueo en el kilómetro 27 de la vía Panamericana, donde comunidades indígenas del norte del departamento del Cauca continúan exigiendo más tierras y mejores condiciones de vida para sus pueblos.
Violencia en el Cauca
Además de los bloqueos por parte de las comunidades indígenas, el conflicto armado sigue afectando a los ciudadanos del departamento, ayer 30 de julio, un cilindro fue activado en la Institución Educativa Técnica Agrícola de Suárez, donde estudió la vicepresidenta Francia Márquez en Suárez, al norte del Cauca.
Según la información entregada por las autoridades, tras un consejo de seguridad, se dio una explosión controlada y permitida. Ese artefacto, que cayó en la escuela, hacía parte de un atentado dirigido a la Fuerza Pública que tenía como blanco una estación de policía del sector.
Luego de conocerse la noticia, en redes sociales, la vicepresidenta Francia Márquez se pronunció sobre los actos violentos: “Rechazo con todas mis fuerzas el acto criminal contra la Institución Educativa Técnica Agrícola de Suárez- Sede María Inmaculada, donde cursé mis estudios de primaria. Los violentos no van a silenciar al pueblo y su anhelo de cambio. ¡Seguimos trabajando por el país. Hasta que la dignidad se haga costumbre!”.
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A su vez, el Alcalde de Suárez, Cauca, anunció que la escuela será revisada pronto y se arreglarán los daños sufridos en los próximos meses para garantizar la educación de los menores.
Además, la noche del pasado sábado 29 de julio, los habitantes del municipio de Dagua reportaron hostigamientos desde la zona alta del sector. Al parecer serían grupos armados ilegales que están asentados en la zona, realizando disparos hacia la estación de Policía del lugar.
Según se aprecia en un video difundido en redes sociales, y de acuerdo con un testigo del hecho, se trataría de trazadoras utilizadas para atentar contra la fuerza pública del municipio. Se escuchan además los disparos y detonaciones.
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