La Universidad Francisco de Paula Santander, seccional Ocaña, visitó la comunidad de Brubucanina del Resguardo Indígena Barí, con el objetivo de orientar el Diplomado en Educación Propia e Intercultural.
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Se capacitaron a 26 docentes nativos, fortaleciendo conocimientos y procesos políticos organizativos a través de prácticas educativas y culturales.
“La Unidad de Educación Abierta y a Distancia en apoyo de la Oficina de Multimedios le apuesta a los procesos de extensión y proyección social, construyendo academia y territorio desde la región del Catatumbo”, indicó el coordinador del programa, magíster José Manuel Alba Maldonado.
Óscar David Montero de la Rosa, líder indígena del pueblo Kankuamo, manifestó que es un proceso que se viene desarrollando con 25 docentes, de las diferentes comunidades.
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“Hemos compartido con ellos temas como autoridad tradicional, organizaciones indígenas, administración propia, planes de vida y algo muy fundamental, la implementación y puesta en marcha del sistema educativo indígena para fortalecer la autonomía y unidad Barí con el fin de seguir perviviendo en este territorio sagrado donde ellos han conservado y podido mantener una vida para los resguardos y también para sociedad colombiana”, recalcó.
Transformación desde la educación
El coordinador del programa, José Manuel Alba Maldonado, señaló que es un ejemplo de las directivas de llegar a todos los rincones de la región para que la universidad sea un referente del desarrollo regional.
“Hemos venido trabajando con campesinos, reincorporados, asociaciones productivas y era el momento de llegar a las comunidades indígenas, encontrarnos con los hermanos mayores, con los indígenas Barí para compartir conocimientos. Un diálogo de saberes obviamente pensando en el desarrollo regional y siempre pensando que el otro Catatumbo es posible”, dijo Alba.
Javier Alonso Santiago Velásquez, profesional de apoyo de la Unidad de Educación Abierta y a Distancia recalcó que el plan estratégico está encaminado en llevar la universidad a la vereda, a los territorios más apartados de la región del Catatumbo.
“Se quiere saldar una deuda histórica que tenemos con estos territorios en conflicto donde hay una gente con saberes, conocimientos ancestrales y culturales que nos permiten a nosotros como docentes y profesionales de la universidad generar conocimientos sobre las nuevas formas de apropiación”, mencionó.
El diplomado se hizo con un experto traído de la Organización Nacional Indígena Colombiana (ONIC) desde la Sierra Nevada de Santa Marta quien a través de su conocimiento realizó un diálogo directo con el pueblo Barí para profundizar con los docentes de las comunidades conocimiento a través de la educación propia, territorio, autonomía y sobre todo se enfatizó en la ley de origen.
“Este espacio es fundamental para la universidad en el sentido que genera una relación real, práctica en el territorio con los pobladores, en este caso con las comunidades indígenas. Nos permite a nosotros como profesionales conocer las realidades de primera mano, diseñar propuestas y si se quiere transgredir lo común. Reinventar nuevas formas en la educación. Entonces, ampliamos nuestra cobertura e incidencia en los territorios, pero, sobre todo, se convierte en un aprendizaje para cada uno de nosotros. La comunidad está conociendo a la universidad y viendo cómo se puede llegar a los lugares más apartados del Catatumbo”, reiteró.
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Los protagonistas
Acuacuara Bashuma Aguishara, de la Unidad de apoyo de la Educación Abierta y a Distancia, mencionó que como pueblos milenarios de primera nación Barí originarios de la zona del Catatumbo se encuentran en 5 jurisdicciones de Norte de Santander que son Convención, Teorama, El Carmen, Tibú y El Tarra.
En esos cinco municipios en el cual corresponde al resguardo Motilón Barí y al Catalaura de La Gabarra cuentan con 23 comunidades.
“La Asociación de Autoridades Tradicionales es la conexión con el Estado colombiano, en ese sentido, hemos tenido un acercamiento. Esa forma de gobierno para poder interactuar con los cabildos lo representa un gobernador como gobierno propio. Las comunidades en relación con los sistemas culturales tienen una forma de educar propia. Los niños aprenden el bilingüismo con el español y El Barí”, dijo.
“Creemos en Sabaseba a quien le pedimos permiso para hacer cualquier actividad. En relación con el conocimiento de la naturaleza y del universo si un Barí va a cazar simplemente le pide permiso a la madre naturaleza y le da gracias. Así hacemos las actividades cotidianas como para pescar o simplemente para ir a recrear. Simplemente hacemos el canto tradicional en primer sentido para la ceremonia de acercamiento de facilitación en el evento y que no tengamos ningún tipo de conflicto para hacer la actividad correspondiente”, precisó.
Cuentan con varias organizaciones como es la educación, salud, saneamiento básico, los guardianes del territorio, los mayores, conocedores y sabedores del conocimiento autóctono y ancestral.
“Hemos venido afrontando, viviendo, conociendo y aprendiendo del otro”, precisó.
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Los maestros
Los profesores que visitan los resguardos resaltan los programas de la universidad para mantener vivas las tradiciones indígenas.
La docente integrante de la comunidad Yera, Wendy Abioquirora Bacquiribayra Bashuna, manifiesta que es importante seguir fortaleciendo la educación propia e intercultural.
“Es un buen mensaje, un compartir para fortalecer la cultura, nuestra lengua, la identidad, los derechos ancestrales en la institucionalidad que no nos discriminen los derechos en los planes de equidad, al igual que los otros. Que no nos miren diferentes, nos hacen entender hoy en día el profesor nos enseña las normas artículos para defendernos y hoy me siento fortalecida y espero en mí, generar esa proyección y transmitir tanto en jóvenes, niños y comunidad hacer respetar los derechos como pueblo Barí”, afirmó.
El docente de la comunidad Ikiakarora, Yan Clokt Bobarishora, señala que una de las grandes expectativas del diplomado es fortalecer los conocimientos en temas como la educación propia. También fomentarla dentro de las comunidades, hacer una réplica una transmisión de saberes de generación en generación.
“Desde los mayores a los jóvenes, entonces creo que se fomenta la educación propia en el pueblo Barí, fortalecer el gobierno propio en medio de la naturaleza y poder apropiar esos conocimientos ancestrales que el mayor nos ha enseñado como legado de Sabaseba, es seguir ese rumbo y no desviar el camino”, reiteró.
La maestra Asaybibina Chimana de la comunidad Ikiakarora indica que se adquieren muchos conocimientos en la formación de docentes Barí, para transmitirlos a los estudiantes de la escuela, la enseñanza y la parte de la pedagogía.
La maestra Luz Mariana Aytrabana Axyranchimana de la comunidad Batroctora resalta la manera como la universidad llega hasta los territorios apartados.
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“Es primordial para nosotros porque aprendemos sobre nuestras culturas, le agradezco mucho a la Universidad Francisco de Paula Santander de Ocaña es una gran oportunidad que nos dan para incrementar nuestros conocimientos. Es difícil viajar hacia allá porque queda lejísimo”.
De esta manera la Universidad Francisco de Paula Santander Ocaña le seguirá apostando a los procesos de proyección y extensión social, construyendo academia de territorio en la región del Catatumbo, indica el magíster José Manuel Alba Maldonado.
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