La campaña para las elecciones legislativas y presidenciales del próximo año definitivamente se anticipará y la gasolina que hacía falta para que se encendieran los motores la terminó aportando el propio presidente Gustavo Petro, luego de anunciar que convocará una consulta popular para que sea el pueblo colombiano el que respalde las reformas sociales que no logró sacar victoriosas en el Congreso.
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Por un lado, el jefe de Estado ha insistido en que el mecanismo de participación no tiene vuelta atrás y que será el pueblo el que hable, y por el otro, los sectores que están en oposición e independencia al Gobierno comienzan a organizarse para hacerle frente no solo a esa convocatoria, sino a la intención de reelegir el proyecto progresista.
Esta misma semana, cuatro partidos tuvieron un primer acercamiento para lo que podría ser una eventual alianza: el Liberal, el Conservador, La U y como invitado especial el Nuevo Liberalismo, que lidera el precandidato Juan Manuel Galán.
La cita fue en la casa del expresidente César Gaviria, jefe único del liberalismo, donde también estuvo su hijo Simón. Los invitados, entre tanto, fueron los directores y principales representantes de esos partidos, como Nadia Blel y Efraín Cepeda, por el conservatismo; Alexander Vega por la U, y Galán por el Nuevo Liberalismo.
Uno de los principales asuntos que se trató fue la conformación de un gran bloque que se oponga a la consulta popular, mediante la cual el jefe de Estado pretende que sus reformas laboral y de salud sean avaladas.
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Según trascendió, lo que buscan los independientes, es que si la propuesta de Petro llega a las urnas, ellos se abstendrán de participar en la misma, con el objetivo de que el poder elector que suman entre todos y que estaría por encima de los cinco millones de votos, no se manifieste y en ese sentido el Gobierno no alcance el umbral que necesita, que es un poco menos de 14 millones de votos.
Cambio Radical, que está en la oposición, ya anunció que no apoyará la consulta, una vez sea presentada a consideración de la plenaria del Senado, “por ser engañosa y tendenciosa”.
“La consulta popular es engañosa y facilita que el presidente de la República se desentienda, por enésima vez, de las responsabilidades propias de su cargo. Responsabilidades que no ha tomado con seriedad ni un solo día, porque lo de él es hacer campaña en lugar de gobernar”, manifestó el senador Carlos Fernando Motoa, vocero de la colectividad.
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El jefe natural de ese partido, Germán Vargas Lleras, también lanzó ya la campaña para enfrentar la idea del mandatario e invitó a todos los partidos y fuerzas políticas a hacer mayorías para “enterrar esta nefasta iniciativa”.
¿Alianza electoral?
Pero la consulta que se podría votar después de mitad de año no es el único pretexto que habría convocado a los jefes de los principales partidos a reunirse esta semana.