Una mejor planeación de las fiestas
Expertos en la materia consideran que los carnales se constituyen en un gran potencial para la reactivación económica de la región, pero falta mayor organización.
“Se requiere cultura ciudadana alrededor de esa festividad, cambiar la mentalidad de las personas que no es tomar licor y generar desórdenes públicos lanzando sustancias nocivas para la salud. En los tres días se vivió una verdadera anarquía donde todo el mundo hacía lo que le daba la gana. El vandalismo se apoderó de las calles céntricas y ensuciaron con pintura lugares como templos, el Museo Antón García de Bonilla y casonas”, indicó el comerciante Felipe Nery Meza Quintero.
Censuró la actitud pasiva del alcalde, la Policía Nacional y el Ejército, ante los desaforados desmanes de unos cuantos ubicados en los alrededores del parque de San Agustín.
“Para nosotros el fin y comienzos de año repuntó la economía, pero no hemos analizado el costo beneficio. Mucha gente no respetó las recomendaciones de bioseguridad y más adelante se verán las consecuencias”, agrega.
Para Javier Ortiz Navarro, presidente de la Asociación fueron tres días de licencia para que los jóvenes hicieran lo que les diera la gana ya que no hubo controles efectivos y la situación se salió de las manos de las autoridades. “Dios quiera que no tengamos que lamentar esa imprudencia con un rebrote en esta zona del país”, reiteró.