Una nueva voz con un dejo muy romántico surge de la potente garganta de Tefi Lázaro, la cucuteña que se enamoró del vallenato desde muy pequeña.
Su timidez no dejaba salir a relucir esa artista que se escondía en su cuarto y en el baño a interpretar éxitos de Jean Carlos Centeno, de Silvestre Dangond y de la desaparecida Patricia Therán. Pero fue en el colegio María Reina, cuando cursaba once grado, que cantó ‘Tarde lo conocí’, delante de sus compañeras. Lo grabó y montó en las redes sociales con la grata sopresa de volverse viral. Esa reacción de la audiencia la hizo tomar impulso y sacudir esos miedos para meterse de lleno en la arena artística.
Estefanía Lázaro Amado, su nombre de pila, aprovechó este tiempo de pandemia para pulir su voz, su estilo y decidirse grabar su primer sencillo, donde contribuyó con algunos arreglos en la letra. Quiso que ese acontecimiento no pasara inadvertido y viajó hasta Valledupar a grabar en los estudios del afamado acordeonero Rolando Ochoa R8 Sound, bajo la dirección de Álvaro Araújo, reconocido productor de la música vallenata, en compañía de Giank Pabón.
‘Si nos cuadramos’ es el título de su primer hijo musical, sacado de una vivencia que tuvo de manera virtual y que sirvió para plasmarla en el sencillo que ya navega en las redes sociales.
“La canción tiene un mensaje muy bonito. Conocí a alguien a distancia, por internet, y me enamoré”. Entonces le dio todas las pistas al artista santandereano Giank Pabón para componerla y a la vez para que tocara el acordeón.
“Estoy gratamente sorprendida por la acogida que ha tenido el disco en las redes. La gente se siente identificada con la historia de amor”.
Tefi Lázaro venía cantando vallenato en tarimas, mucho antes de la pandemia, acompañando a artistas de talla nacional, en compromisos privados y en discotecas.
Y con la aparición del coronavirus empezó a grabar ‘covers’ en las redes sociales hasta que llegó el preciso día para darse a conocer por sus méritos.
Además de cantar vallenato estudia medicina veterinaria-zootecnia en la Universidad de Pamplona donde adelanta el sexto semestre. La joven organiza su tiempo, de tal manera que le da cabida a esas dos pasiones. De lunes a viernes se dedica a la veterinaria y los fines de semana a cumplir compromisos acompañada siempre de su primo Camilo Pabón.
Tefi se considera muy centrada y distingue los escenarios a los que se tiene que enfrentar, a pesar de su corta edad. Entiende que los ambientes en que se desenvuelve, en algunas ocasiones, son hostiles, pero pone freno de mano con mucha sabiduría. Es la hija menor de tres hermanos y su familia la apoya en esta carrera en donde las mujeres han incursionado con éxito despúes del grupo que lideró Patricia Therán.
No digita aún el acordeón porque considera que es un instrumento complejo, de mucho respeto, pero primero está aprendiendo a tocar guitarra y piano.
La novel artista cucuteña ha sorteado muy bien este largo año de pandemia y dice que aprovechó el tiempo para afinar su garganta, ensanchar el repertorio y consentir a su mascota, la perrita ‘Chayo’ de raza criolla “ que lleva 16 años conmigo”.
Mañana, Día de las Madres, estará celebrando en familia, con todos los protocolos de bioseguridad, donde por lo general se convierte en el centro de la reunión con su voz romántica del vallenato. Da gracias a Dios por permitir seguir disfrutando de su madre, más en esto tiempos de confinamiento. Y poder emprender nuevamente con su trabajo los fines de semana, acompañada de acordeón, caja y guacharaca.