Después de un mes del asesinato de Nicolás Felipe Rivera Montañez, ocurrido en la calle 26 con avenida 28 de Barrio Nuevo, al ser impactado con un balazo en la cabeza, las autoridades que le siguen el a los involucrados en el crimen.

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Los investigadores tienen indicios de que la muerte de Rivera se dio en medio de un intento de atraco.

Según se conoció de manera extraoficial, la víctima tenía conversaciones con una mujer a través de una red social, por lo que la tarde del martes 10 de mayo, mientras compartía unas cervezas con dos amigos, decidió concretar una cita con la desconocida, justamente en el lugar donde fue asesinada.

Nicolás Felipe, oriundo de Cornejo, llegó en compañía de dos amigos hasta este sector de Barrio Nuevo, en su carro Chevrolet Onix, de placa JGX-461, con la intención de recoger a la mujer.

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“Ellos, al parecer, estuvieron en Motilones, en la ciudadela Juan Atalaya y luego coordinaron la cita acá con la amiga de la víctima y cuando llegaron se les acercaron dos hombres y le dispararon al conductor del carro”, explicó una fuente judicial cercana a las indagaciones, en el momento del hecho.

Rivera Montañez alcanzó a saludarse con su amiga, cuando de repente llegaron dos hombres a pie, cada uno con un revólver, y al parecer, le lanzaron una ofensa y luego apretaron el gatillo.

Los testigos del hecho les indicaron a las autoridades que uno de los agresores le gritó a Nicolás Felipe “muy picado de carro”, por lo que él aceleró el vehículo para tratar de huir, pero en ese instante le dispararon y lo impactaron en la cabeza, causándole la muerte de manera inmediata.

El vehículo siguió andando hasta que quedó internado en la maleza que está a un costado de la cancha y chocó contra un palo.
Los acompañantes de la víctima resultaron ilesos, mientras que los pistoleros huyeron.

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“Lo que se ha podido recopilar es que al señor (Rivera) lo intentaron robar, pero él al darse cuenta aceleró el carro para huir y ahí fue cuando le dispararon”, dijo una fuente judicial.

Aunque inicialmente se rumoró que podría tratarse de una situación pasional, las primeras pesquisas del hecho apuntan a que fue por robarlo.

Una captura

Minutos después del asesinato, uniformados de la Policía Metropolitana de Cúcuta capturaron a un hombre, de 34 años, en la entrada del barrio Belén, al identificar las mismas características que les entregaron los testigos y vecinos donde ocurrió el homicidio.

Cuando interceptaron al sospechoso, los policías verificaron con los testigos del crimen, si este hombre era uno de los que participó en el hecho de sangre y ellos lo confirmaron.

Sin embargo, el detenido no portaba ningún arma, por lo que así quedó a disposición de la Fiscalía mientras continuaban las investigaciones. “Ya ubicamos a la mujer que concretó la cita con la víctima y estamos buscando a los que cometieron el hecho”, dijo la fuente judicial.

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