El homicidio de Yefri Steven Chacón Morantes, ocurrido en un canal de aguas lluvias del barrio Carora, está rodeado por un manto de misterio, pues en el sitio no hay cámaras de seguridad que registraran el ataque y nadie se atrevió a hablar con las autoridades para contar cómo había sucedido.

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Aunque para los investigadores es prematuro establecer una hipótesis sobre qué habría provocado este hecho de sangre, tienen en cuenta que en ese sector donde ocurrió, que es cercano a la Terminal de Transporte de Cúcuta, hay varios expendios de drogas que son manejados por algunas bandas.

“El asesino podría ser algún reconocido delincuente de la zona, pero es muy temprano para señalar a alguien como el responsable. Solamente sabemos que la víctima había estado sometida a un proceso de rehabilitación por el consumo de drogas, hasta hace unos tres días, pero en la zona nadie dice algo sobre el homicidio, por temor a represalias”, contó una fuente judicial.

¿Cómo lo asesinaron?

Lo que tienen claro las autoridades es que Chacón Morantes, de 20 años, llegó el viernes a las 8:30 de la noche al canal de aguas lluvias, ubicado en la calle 2 entre avenidas 12 y 13, y se hizo en un borde, cerca a la ventana de una casa.

Hacia las 9:15 p. m., un pistolero llegó hasta donde estaba parada la víctima, desenfundó un arma y le propinó un balazo en la cara.

“Nosotros luego de escuchar el tiro, salimos de la casa y auxiliamos al muchacho, que estaba agonizando, tenía la cara ensangrentada. Cuando los policías llegaron, él ya estaba muerto, él no se la pasaba en el canal, nunca lo habíamos visto”, sostuvo un habitante de ese sector donde se presentó el crimen.

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Los policías al confirmar que Yefri Chacón había muerto, acordonaron la zona y le dieron aviso a la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) para que se encargara de la inspección técnica y el levantamiento del cuerpo.

Unos familiares de la víctima llegaron hasta el sitio y protagonizaron una escena de llanto, dolor y hasta rabia, mientras los peritos forenses adelantaban las pesquisas para encontrar evidencias sobre el homicida.

“Lo duro es que nadie habla y no hay cámaras de seguridad que registraran el homicidio, se esperarán los resultados de Medicina Legal para iniciar con la búsqueda del asesino”, explicó la fuente.

Y añadió que se investiga qué hacía la víctima en ese canal que, según se conoció, es frecuentado a cualquier hora del día por drogadictos y habitantes de calle para hacer sus necesidades fisiológicas o consumir drogas.

‘Lástima que terminara así’

Con la voz entrecortada, un amigo de la infancia de Yefri Steven Chacón lo recordó como una persona tranquila que un día tomó el camino equivocado hacia ‘el mundo de las drogas’.

“Él nunca hablaba de amenazas, nosotros nos criamos juntos y por cuestiones de estudio y trabajo nos alejamos, es muy triste levantarse hoy (ayer) y recibir una noticia tan impactante”, sostuvo el amigo de la víctima.

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