La Fundación El Pilar, en alianza con UNICEF, el Club Rotario Cúcuta Ciudad de los Árboles, Centrales Eléctricas de Norte de Santander (CENS), el Instituto Bolivariano Esdiseños (IBES) y McCormick Bakery, fomentan la integración cultural en infantes de 7 a 13 años por 3 barrios periféricos de la ciudad: La Conquista, Colombia Uno y La Fortaleza.

“KAIRÓS, es una Escuela de Integración y Cultura Ciudadana que ofrece la oportunidad a niños, niñas y jóvenes de crear conciencia y generar cambios de percepción y conducta que favorezcan las condiciones para la integración, para una sana convivencia comunitaria y familiar”, comentó R.E.I Santana, asistente de comunicaciones de la Fundación El Pilar.

El proyecto que arrancó desde el 21 de julio de este año, está planificado para ir durante dos meses a estas comunidades para, por medio del arte, enseñar valores ciudadanos, principios cívicos, auto-cuidado, deberes y derechos, cuidados al medio ambiente e integración con población migrante y de movilidad humana.

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“Nace desde una investigación de campo ejecutado en la ciudad, el proyecto se creó específicamente para estas comunidades porque encontramos necesidades similares: existe un gran porcentaje de migrantes venezolanos, colombianos retornados, madres cabeza de familia, líderes comunitarios, población LGBTI, afro descendientes y víctimas del conflicto armado, quienes suelen verse afectadas por flagelos sociales, deserción escolar e inseguridad”, explicó Santana.

El impacto ha sido mayor del esperado, según expresa el comunicador, de 120 niños para los cuales estaba pensada la escuela, se inscribieron 136, varios de ellos están fuera del sistema educativo.

A cada niño se le da una cartilla con el contenido de cada modulo así como los materiales para el desarrollo de cada actividad propuesta, además acompañamiento psicosocial constante de manera gratuita.

La Fundación va dos veces por semana a cada barrio.

“En varios casos se ha activado la ruta de atención con la colaboración de la psicóloga que nos acompaña, estamos generando procesos formativos para que los niños propicien el aprendizaje en su familia. Hemos notado el entusiasmo de venir a clase, su constancia y ganas de aprender, varios padres han destacado nuestra labor porque notaron una mejoría en la actitud de los niños con los desafíos que enfrentan a diario”, manifestó Santana.

Omaira Bastos, líder comunal del barrio La Conquista, destaca favorablemente la relevancia de esta intervención en su comunidad,  espera que en un futuro la escuela continúe  y acepte jóvenes de mayor edad.

“El proyecto le abre las posibilidades a los jóvenes y a los niños, de relacionarse con el arte. El trabajo que han hecho hasta ahora es excelente, los padres están muy felices, algunos me comentaron que sus hijos estaban desarrollando habilidades que no tenían o no sabían, estamos muy agradecidos con la Fundación El Pilar”, manifestó Bastos.

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La metodología de las clases, hacen entretenido el aprendizaje para los niños, que entre charlas participativas y dinámicas de grupo van construyendo las enseñanzas del día con formadores y artistas reconocidos por su vocación a temáticas relacionadas con la construcción de tejido social.

“Dividimos el grupo en 2, uno de 7 a 10 años, y el otro de 11 a 13, con esto buscamos conectar el sentir con los deseos de los niños con el arte, para permitirles expresar su realidad, facultando la inclusión de múltiples voces en un ejercicio de entendimiento y reconciliador”, afirma el integrante de la fundación.

Son seis módulos que se imparten en distintas ramas de disciplinas del arte: El primero es el dibujo con Hender Higuera, el segundo es pintura con Samir Quintero, el tercero es Moldeado con Amparo Cárdenas, el cuarto es Cuerpo con David Sayago, el quinto es música y sonido con Ahiman y el sexto es escritura creativa con Keila Ovalle.

Los insumos de cada actividad son ofrecidos por la escuela, los niños han recibido colores, cartillas y bolsos.

Un caso de éxito

El trato de los conflictos y desafíos ha sido uno de los temas relevantes en la ejecución del proyecto. Santana narra que hace unas semanas dos niños, luego de una mención en tono de burla por parte de uno de ellos, se pelearon a golpes recién terminó la actividad ese día.

“No pasó a mayores, nosotros los detuvimos y cuando estuvieron más calmados dialogamos al respecto, hasta que las asperezas fueron removidas, los chicos firmaron un pacto de no agresión que validamos y desde entonces no se han presentado más inconvenientes”, concluyó Santana.

La escuela finalizará su proceso educativo con una exposición de las obras desarrolladas por los niños, serán expuestas el 22, 24 y 28 de septiembre en comunidades de Colombia Uno, La Fortaleza y La Conquista respectivamente.

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