“Ninguno de nosotros es tan bueno solo, como todos nosotros: juntos”, Lissa Lootof Perlo.
Todos deseábamos que el Señor Alcalde de Cúcuta, desde el inicio de su mandato hubiese acertado en la integración de su equipo de trabajo de hombres relativamente jóvenes, que en nuestro medio se es siendo cuarentón. Una edad que se puso de moda cuando John F. Kennedy llegó a la presidencia norteamericana.
Y que en estos ocho meses el equipo de gobierno, ya estuviese integrado, pues al decir de López Michelsen, cuando la identidad de visión y de cambio está marcada y definida, se “chambonea” muy poco y con un semestre basta.
No lo ha logrado inexplicablemente, pero deseamos que lo logre al término de este semestre que finiquita con pandemia y emergencias graves. De todas formas, en periodos administrativos cortos un semestre perdido, es un sueño vuelto pesadilla. Y nos da mucho miedo otra frustración.
Pero bueno, lograron la aprobación del plan de desarrollo 2020-2023, sobre el reproche que los giros nacionales, representan el 75% y que el municipio San José de Cúcuta es incapaz de autofinanciarse, que el sector productivo formal se estancó hace veinte años y ante ello la propuesta es una estrategia y visión futurista desde la educación, la cultura ciudadana, el emprendimiento, la innovación, la generación de valor agregado, la defensa del medio ambiente, la actualización tecnológica, la atracción de inversión y la productividad como determinantes claves , para invertir el crecimiento negativo de los indicadores existentes.
La propuesta es un desafío colosal que debe liderarse en equipo. Sí, con un excelente equipo de trabajo, para que en los tres años que restan, se coloque a las próximas administraciones en los rieles del cambio, que se invierta el crecimiento negativo en las siguientes décadas. Ello toma unas cuatro administraciones venideras, en una positiva visión de politólogos.
Por ahora, hay que lograr integrar el equipo de trabajo, como lo logró el alcalde de Barranquilla y sus secretarios, que en la visita que les hizo el viernes pasado del señor presidente, cada uno pasó al tablero y sustentó lo que exigían del gobierno central y que con los estudios y proyectos presentados, el presidente Duque se comprometió a iniciar, con recursos del Gobierno Nacional, alineados con el Plan de Desarrollo Nacional.
Una hoja de ruta, por la recuperación de la Ciénaga de Mallorquín, comprometiendo una inversión en ella de $281.000 millones de pesos, la modernización de Transmetro, para recuperación de canales y mitigar riesgos de inundaciones metropolitanas $230.000 millones, para Proyectos de Acueducto y saneamiento de Barranquilla $516.000 millones. Para conectar los mercados del interior del país y de la región Caribe país con el mundo u futuras concesiones de acceso terrestre $1.200 millones de Dólares.
Todo esto se logra con la integración de un excelente equipo de trabajo, que estudie, que proyecte, que arme el documento, de tal manera que en la próxima visita del señor presidente Duque, a quien respetamos mucho, y que sea exclusiva para el municipio de Cúcuta, el señor alcalde pueda concretar la propuesta que le aprobó el Concejo de Cúcuta, como Plan de Desarrollo 2020-2023., que por ahora, quedó bien escrita y que al final de las 380 páginas mencionó en tres renglones : CÍNERA.
Adenda: La voz del Doctor Gustavo Salgar, es el simbólico testimonio de todos los cucuteños, contiene todas nuestras inconformidades y protestas en esta pandemia, ante la insensibilidad de los niveles, nacional, departamental y municipal. Y no olvidemos: ¡No salgas, quédate en casa!
