Amables lectores: Cuando estudiaba Ingeniería Química uno de los conceptos termodinámicos más difíciles de entender era el de la entropía. Por definición es un término científico asociado con un estado de desorden, incertidumbre y un alto grado de impredecible. Lamentable este término podría ser aplicado en Colombia al estado de la nación.

Por fortuna para los colombianos, la entropía en física no es siempre irreversible y nos debemos preguntar qué debemos hacer cada uno de los ciudadanos para lograr revertir y lograr la entropía negativa.

Se debe terminar con la crítica destructiva pues esto solo impulsa el derrotismo.

No es sano y mucho menos útil seguir lamentándonos de lo ocurrido en las pasadas elecciones presidenciales, cuando los Colombianos elegimos a Petro como presidente al no encontrar por quién votar. Es necesario identificar los líderes que logren unir esfuerzos para reconstruir la seguridad ciudadana, restituir la capacidad de generar ingresos, revisar la minería ilegal y reconstruir la minería legal. Se debe guiados por estos líderes estimar la inversión en la industria de la construcción y se debe reactivar la inversión pública unida a la privada. Pero para lograr todo lo anterior es indispensable reaprender a dialogar.

Decía Álvaro Gómez Hurtado que no se puede negociar con la vida humana y recuerda que el terrorismo es un delito contra la humanidad. Es indispensable preservar la vida humana y no se puede cobrar por no matar.

El desarrollo del potencial de gas nacional, gas hecho en Colombia, debe tener un lugar asegurado en las estrategias para asegurar los retos del desabastecimiento.

Se ha confirmado en los últimos días el interés del palacio de Nariño de iniciar la importación de la petrolera Venezolana PDVSA. El presidente textualmente afirmó “Habrá gas de Venezuela en Colombia y electricidad colombiana en Venezuela”. “El presidente de Ecopetrol afirmó que hay un déficit del 16% en el suministro de gas en Colombia”. La decisión de comprar gas a Venezuela y la negativa del gobierno colombiano de explorar hidrocarburos, alegando razones climáticas pero por simples razones ideológicas sí se consumirá el gas comprado a Venezuela y la ciudadanía se pregunta: Será que este gas no contamina el medio ambiente?

 No puede Colombia perder la soberanía energética; es importante recordar la dificultad de robustecer la soberanía energética de Colombia cuando no se avanza en nuevos proyectos de exploración y explotación de petróleo y de gas natural. Gas natural colombiano ha sido descubierto en la costa caribe y piedemonte llanero. Se debe estimular la producción de estos nacimientos de hidrocarburos. Tengamos presente que, por capricho, no autorizar nueva exploración de hidrocarburos es peligroso para la seguridad energética del país.

Estamos viendo un enfriamiento entre el gobierno nacional y la alcaldía de Bogotá sobre el metro. Mientras la presidencia propone soterrar un tramo del proyecto y afirma que el mejor metro para Bogotá es el metro mixto, el alcalde de Bogotá Carlos Fernando Galán, afirma que “frente al metro de Bogotá ni un paso atrás”. Que él no está dispuesto a “cambiar certezas por incertidumbre”. Ya existe inversiones hechas en el metro por 2.9 billones de pesos y tiene un avance del 30.86%. Estimo que acierta el alcalde en mantener su compromiso con la continuación del contrato y se espera que pueda entrar en servicio en el primer trimestre del 2028.

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