La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Columnistas
¿Condenados a más de lo mismo?
Es preocupante la perspectiva de seguir rezagados, bajo el peso dela desigualdad, de los delincuentes que no se sacian de matar.
Authored by
Domingo, 22 de Septiembre de 2024

Los problemas que padece Colombia son el resultado de la permisividad de la mayoría de quienes han tenido el control del poder. Revestidos de los privilegios acumulados imponen su voluntad dogmática de cerrarle el paso a toda posibilidad de  cambio.

La Constitución de 1991 representó una apertura democrática. Entre los principios acordados se destaca lo consagrado en el artículo1:“Colombia es un Estado  social de derecho, organizado en forma de república unitaria, descentralizada con autonomía de sus entidades territoriales, democrática, participativa y pluralista, fundada en el respeto de la dignidad humana, en el trabajo y la solidaridad de las personas que la integran y en la prevalencia del interés general”.

Pero lo dispuesto por el constituyente no concuerda con la realidad. Derechos fundamentales como la vida, la salud, la educación y el trabajo tienen reconocimiento a medias. Se les maneja más como negocio para beneficio particular. El régimen de propiedad de la tierra es otronudo de herencia feudal, en detrimento de los campesinos pobres y de la nación en general.

Aunque se habla con insistencia del cumplimiento de la ley, de la defensa de la institucionalidad y de la democracia, es diferente lo que se hace. Es una contradicción que le abre espacios a la corrupción, a la violencia, a muchos otros desatinos con que se condimenta la política.

Esos males pasan por el Congreso. Allí la mayoría tiene compromisos con los círculos de beneficiarios del poder. Dos actuaciones demostrativas del manejo autoritario de las cámaras legislativas fueron las de David Name y Efraín Cepeda desde la presidencia del Senado. El primero decide levantar la sesión para evitar la aprobación de un proyecto. El segundo se jacta de tener las mayorías para hundir otra iniciativa de procedencia oficial.

Además, el Congreso le sirve de caja de resonancia a los que se atraviesan a cualquier iniciativa de cambio. Ocurrió con la reforma a la salud.  Se le enterró con el triunfalismo de quienes se creen dueños de la verdad.

Aquí se hace necesario rescatar la democracia para articularla al manejo de la nación. La democracia como expresión de la justicia a fin de que predomine el derecho.

Se hace prioritario también asumir la política como un ejercicio de ideas en función de la sociedad en general. Es el debate sobre los asuntos públicos, para buscarle solución a la diversidad de problemas que afectan a la comunidad nacional.

Es preocupante la perspectiva de seguir rezagados, bajo el peso dela desigualdad, de los delincuentes que no se sacian de matar.

Colombia no puede estar condenada a la adversidad de más de lo mismo. Se impone levantar el statu quo que para muchos es un suplicio. Es poner a Colombia en el rumbo del desarrollo, con educación, salud, seguridad y derechos en general que garanticen dignidad humana. Este compromiso ciudadano debe estar en la demanda cotidiana. Y la participación debe ser amplia. Logarlo no le hace daño a nadie y en cambio, fortalece a la nación.

Puntada

Los grupos armados desprecian la democracia y se regocijan con la muerte. Es la soga que se han puesto al cuello ellos mismos.

Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en https://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion

Temas del Día