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Chambonear
Gobernar es mucho más difícil que hacer oposición pues requiere prudencia, paciencia e inteligencia. El poder es difícil de administrar.
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Miércoles, 7 de Febrero de 2024

Amables lectores: consultando el diccionario Larousse encontramos la palabra chambón que significa torpe o poco hábil. Persona que consigue por casualidad alguna cosa y chambonear es el desacierto propio del chambón.

“Gobernar es decidir” afirmaba Pierre Mendes quien fue un célebre primer ministro Francés de la cuarta República. El ejercicio del poder obliga, todo el tiempo, a tomar decisiones de diferente alcance.

Gobernar es mucho más difícil que hacer oposición pues requiere prudencia, paciencia e inteligencia. El poder es difícil de administrar. Todo el país se ha dado cuenta que el gobierno del cambio es un desastre por el estilo caótico como su propia vida, que ha caracterizado a Gustavo Petro. El primer conjunto de decisiones que el gobierno debe tomar es la escogencia acertada de quienes van asumir el liderazgo, caso concreto los ministros.

El caso de la ex ministra Irene Vélez en un gran ejemplo de un error de designación como lo es el del actual ministro de defensa. Hay que designar técnicos donde los temas requieran conocimientos específicos. Para poder hacer una buena gestión es necesario saber de los temas. Dice Miguel Gómez que “el conocimiento genera respeto y mueve al trabajo a los subordinados”.

Son inexplicables los relevos en las fuerzas militares, durante este gobierno. El presidente parece sumergido en una zozobra permanente que le impide actuar con claridad, celeridad u oportunidad que requiere un país tan complicado como este.

En un tema tan sensible como la salud, el gobierno ha seleccionado a personalidades tan conflictivas como la ex ministra Corcho o el actual ministro Jaramillo. El costo político de esos funcionarios por declaraciones que generaron como el cuestionamiento de las vacunas debían haberse evitado.
¿Cuál es el resultado de todo lo anterior? Procesos paralizados, presupuestos congelados, nombramientos no formalizados o suspendidos y una total falta de acción estatal. Se ha deteriorado la seguridad a nivel nacional y existe una gran incertidumbre en la economía. La disminución del desempleo mayor recaudó de impuestos y estabilidad en las tasa de cambio no impactan a la economía y son numerosas las actividades productivas que se han paralizado debido a la torpeza y chamboneo del gobierno.

Aquellas desapariciones y retrasos de Petro, se han convertido en algo cotidiano, en realidad, son un reflejo de la falta de seriedad y de orden que reina en el país. Llevándonos a su punto más preocupante como es la cancelación de Barranquilla como sede de los juegos Panamericanos para  2027.

Igualmente otra perla, el señor Germán Velásquez, a quien Petro, desde Octubre, anunció como nuevo director del Invima, rechazó la oferta pues luego de tres meses su nombramiento no había sido formalizado.

Ejercer el poder desgasta. Un buen gobierno debe evitar todos los conflictos y polémicas innecesarias pero parece que esa no es la estrategia de este gobierno, donde los escándalos se producen a diario.

A estas alturas, si el presidente no ataja el chamboneo, debe saber que corre el riesgo que este lo ataje, por todo el caos que produce.


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