En medio de los grandes retos que enfrenta el medioambiente, como la reciente alerta roja de Naciones Unidas sobre una crisis climática sin retorno, precisamente el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de la ONU presentó el lunes pasado el informe más alarmante de ese organismo hasta la fecha, en el que concluye que las emisiones continuas de gases de efecto invernadero podrían superar un límite clave de la temperatura global en poco más de una década.

La preocupación crece porque, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la contaminación atmosférica en las ciudades es una de las principales causas de riesgo de padecer enfermedades respiratorias agudas, crónicas y cardiovasculares.

De acuerdo con Carlos Eduardo Correa, Ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, “la contaminación del aire es el principal riesgo ambiental para la salud pública en las Américas y, desafortunadamente, en Colombia cada año ocurren alrededor de 17.500 muertes por exposición al aire y al agua de mala calidad; es decir, el 8 % del total de la mortalidad anual en el país”.

Según el estudio más reciente realizado por el IDEAM, en el país se generan al año 258 millones de toneladas  de CO2 como resultado de la combustión que se origina de las industrias, autos y otros procesos que involucran esos materiales que provienen de restos fósiles, por lo que se requieren alternativas inmediatas para mejorar la calidad del aire y por tanto, la salud de los colombianos.

Precisamente, en el Día Interamericano de la Calidad del Aire, se presentan diferentes alternativas de movilidad que están al alcance de los colombianos y cucuteños, para contribuir a este fin:

• Aumentar el uso de la bicicleta: Solo en la ciudad de Bogotá se movilizan más de 800 mil personas en este vehículo. De acuerdo con la Política Pública de este medio de transporte, proyecta que, para 2027, el 12 % de los viajes podrían realizarse a través de este medio de transporte que es de fácil acceso y contribuye a la salud cardiovascular.

• Usar el transporte público: Colombia cuenta con sistemas masivos de transporte que han venido transformando su parque automotor, con tecnologías más limpias como la Euro VI, lo que reduce de manera significativa las emisiones contaminantes. Usarlos permite contribuir a la calidad del aire, teniendo en cuenta que movilizan un número mayor de personas que un vehículo personal

• Compartir vehículo particular: El parque automotor de los colombianos ha venido en aumento con el pasar de los años. Solo en la ciudad de Bogotá se movilizan más de 2 millones de autos, lo que incrementa las emisiones de GEI y material particulado, es por esto que es posible contribuir al planeta compartiendo el vehículo cuando varios usuarios manejan la misma ruta.

• Fomentar el uso de los biocombustibles: De acuerdo con estudios de la Federación de Nacional de Biocombustibles, estos energéticos que se producen en el país a partir de la caña de azúcar y la palma de aceite, que están mezclados en los combustibles que se usan en todo el país, representan la alternativa de más rápida adopción para la disminución del material particulado nocivo para el ser humano.

Desde el inicio del Programa Nacional de Biocombustibles en Colombia, las mezclas de los biocombustibles con los combustibles fósiles han dejado de lanzar a la atmósfera alta más de 28 millones de toneladas de gases de efecto invernadero y más de 7 mil toneladas de material particulado, lo que equivale a retirar de circulación entre 400 mil y 1,5 millones de vehículos al año.