La práctica de la contemplación de aves en la región comienza a transformarse en una alternativa turística que busca convertirse en un motor de desarrollo económico en muchos municipios de Norte de Santander.
De acuerdo con el registro mundial de aves Ebird, en Colombia hay 1.966 especies de aves, de las cuales 744 están en Norte de Santander. Es decir, el departamento tiene más especies que España o Reino Unido que no superan las 700.
Y es que de a poco, los avistadores han ido cautivando a más personas e involucrando a las autoridades estatales para que se animen a creer en un turismo sostenible y saludable con el medio ambiente.
Para Wilson Ortega, un arboledano enamorado del avistamiento de aves y quien ya completa 13 años en este oficio, cuenta que en el departamento hay rutas consolidadas en Arboledas, Chinácota, Bochalema. Pamplona, Chitagá, La Playa de Belén, Ocaña y Toledo.
En Cúcuta también empezó a crecer esta práctica y junto con la Alcaldía se comenzaron a estructurar las primeras rutas de avistamiento, sobre todo en El Malecón, a lo largo del río Pamplonita.
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En el territorio hay un potencial enorme. “Debemos aprovechar que en el departamento se cuenta con cuatro parques naturales y cinco parques naturales regionales donde perfectamente se pueden hacer esta práctica. Además, tenemos a nuestro favor que contamos con aves diferentes a las que tiene toda Colombia”, cuenta con orgullo Ortega.
De acuerdo con el experto, Colombia tiene cerca del 20% de todas las aves del mundo y la mitad de los colibríes del planeta, entonces hay insumo suficiente para seguir explorando esta práctica.
“El número de aves que tenemos registradas hasta la fecha es un número dinámico que seguramente va a subir en la medida que hagamos más investigación. Entonces esto nos da un potencial enorme y sobre todo que da la posibilidad de que todos los 40 municipios participen porque tienen ofertas variadas en aviturismo”, contó Ortega.
Práctica potencial
Recientemente el departamento fue escenario de un encuentro binacional de aviturismo en el que participaron avistadores de Venezuela y de Magdalena, Bogotá, Antioquia y Pereira, así como internacionales de Inglaterra y Luxemburgo, donde se observaron más de 100 aves durante los recorridos que se hicieron en Cúcuta, Chinácota, Toledo y Arboledas.
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“Ya hay rutas consolidadas y hay grupos de avistadores de guías locales, aunque no hemos avanzado mucho, si tenemos una buena base para promocionar el aviturismo”, recordó Ortega.
Pablo Clavijo, director de la iniciativa Clúster de Turismo ‘Norte Mi Destino’, de la Cámara de Comercio de Cúcuta, aseguró entidad que trabaja de la mano con la Gobernación de Norte de Santander, la Consejería de Turismo, Fondo Nacional de Turismo (Fontur), Asociación Hotelera y Turística de Colombia (Cotelco), ProColombia y la Corporación Mixta de Promoción de Norte de Santander, en estructurar una visión de turismo, bajo la mirada de las buenas prácticas aplicadas en otras regiones del mundo con particularidades similares a la cuidad.
Sin embargo, el reto sigue siendo el de expandirse y vincular a más actores teniendo en cuenta que es una práctica sostenible con el ambiente y que contribuye a dinamizar muchos sectores porque los turistas no solo vienen a observar aves, sino que requieren de hoteles, comida y transporte, entre otros servicios.
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