Si algo se ha caracterizado en el deporte es tener grandes figuras, que se destaquen por su país, ciudad, departamento o municipio, donde nacieron, crecieron y se formaron.
De cierta manera la mayoría quieren que sean recordados por sus logros porque no se dejaron vencer por las adversidades, así no hayan llegado tan lejos aunque lo soñaron y lo intentaron.
Jesús Javier Mosquera Moreno de 49 años es un tibayano que se hizo boxeador con muchas dificultades, que siempre soñó con representar a Norte de Santander y dejar en alto los colores rojo y negro del departamento.
Fue medallista de plata en los Juegos Nacionales de 1992, luego se fue para Venezuela a buscar una mejor oportunidad, para ser profesional en el deporte de las narices chatas.
Con el tiempo viajó a Nueva York y se codeó al lado del mejor empresario de boxeo del mundo, ‘Don King’, soñando con ser un gran peleador, pero no fue fácil tiendo que regresar para finalmente radicarse en Caracas, Venezuela en 1998 donde formó una familia, con Carmen Josefina Britto.
Por su estatura y corpulencia, trabajó como escolta y como operario de la petrolera PDVSA.
De esa unión nacieron sus hijos Jesús Javier y Alba María Ángeli, quienes también salieron deportistas, Jesús Javier es beisbolista y Alba María voleibolista.
Sin embargo, Javier quiso que su hijo siguiera sus pasos, esos que él no pudo culminar como hubiera querido, con un título mundial.
Jesús Javier Jr, persuadido por su mamá Carmen quien le ganó ‘el combate’ a su marido no dejó que su consentido fuera boxeador apoyándolo más para el deporte de le pelota caliente.
La Opinión dialogó con este colombo-venezolano nortesantandereano de sangre, de 19 años, por decirlo de cierta manera, que juega en la posición de lanzador (Picher), y actualmente ha sido fichado por los Navegantes de Magallanes el mejor equipo venezolano, y por la escuela de ligas menores los Rangers de Texas, que está en República Dominicana.
¿Quién es Jesús Javier Mosquera Britto?
Jesús Javier Mosquera Britto es un joven que desde muy pequeño ha soñado con ser un beisbolista profesional.
¿Su papá, nacido en Tibú Norte de Santander fue boxeador por qué no siguió sus pasos?
Mi papá fue deportista, siempre quiso inculcarme el deporte, no importaba que deporte fuera, si no hacerlo con el corazón y tratar de ser el mejor. Y a mis padres siempre quise darles el orgullo de ser un pelotero profesional.
¿Es cierto que su mamá no quiso que fuera boxeador?
La verdad, sí porque el boxeo es un deporte muy fuerte y a mi mamá le daba miedo que lo practicara.