Apenas han transcurrido 16 meses desde que tomaron posesión los nuevos concejales elegidos para el periodo 2020-2023, y en Cúcuta a dos de ellos ya les anularon la elección por estar inhabilitados para aspirar a ese cargo.
El primero en ser despojado de su curul fue Mario Vicente Figueroa, de Colombia Renaciente, quien muy temprano, en febrero de 2020, terminó suspendido como parte del proceso que se adelantaba en su contra, y a finales de 2020 le confirmaron la nulidad de su credencial.
Por estos hechos, el Concejo tuvo que sesionar casi un año con tan solo 18 integrantes.
El turno ahora es para el concejal Luis Alejandro Castellanos, del Partido Liberal, a quien el Consejo de Estado le acaba de ratificar el fallo de primera instancia que había proferido el Tribunal Administrativo de Norte de Santander, anulando su elección.
Castellanos había sido demandado por Luis Alfredo Vargas Torres, quien alegaba que el dirigente no podía presentarse a las elecciones de 2019, porque contrató con una empresa del Estado un año antes de esos comicios.
La decisión de primera instancia se conoció en enero de este año, pero como fue apelada llegó al Consejo de Estado que, en segunda instancia, ratificó las consideraciones que tuvo del Tribunal para dejar sin efecto la credencial del cabildante.
Luis Alejandro Castellanos, quien se ha desempeñado por años como líder comunal, cumple su primer periodo en el Concejo de Cúcuta. Apenas unos días después de asumir el cargo, tuvo que empezar a hacerle frente a la demanda en su contra.
El dirigente liberal defendió hasta último momento su elección, pues su entrada a la corporación municipal se terminó definiendo en los escrutinios que se prolongaron varias semanas después de celebrada la contienda electoral.
Aunque en el preconteo Castellanos aparecía como el acreedor de la curul, los conservadores emprendieron una dura puja por quedarse con ese lugar, toda vez que apenas 100 votos separaban a rojos y azules.
El conservatismo estaba decidido a lograr un cuarto escaño en este periodo, que sería para José Ricardo Ayala, y en ese sentido presentaron un buen número de recursos para que siguiera el reconteo de los votos. Al final, sin embargo, la batalla la terminó ganando Castellanos, quien no se dejó arrebatar la credencial.
Aunque el fallo que deja por fuera del Concejo a este dirigente ya no tiene reversa, no se descarta que la defensa del concejal acuda a una acción de tutela u otros recursos que aún le quedan, para alargar su estadía en la corporación.
¿Quién llega?
Una vez quede en firme la decisión en contra del concejal Castellanos, el llamado a reemplazarlo será el exconcejal George Alexander Salazar Márquez, quien es el siguiente candidato con más votos en la lista del Partido Liberal (2.315 apoyos ciudadanos).
Salazar ya había sido concejal en dos periodos anteriores (2008-2011 y 2016-2019) y su carrera política ha estado vinculada al liderazgo comunal, principalmente en el barrio Loma de Bolívar.
El próximo integrante de la corporación municipal perteneció durante mucho tiempo al grupo político de los Cristo, pero antes de terminar su último periodo se alejó de esa organización.
En las elecciones de 2019 apoyó abiertamente la candidatura a la Alcaldía de Jaime Marthey, quien contaba con el respaldo del representante a la Cámara, también por el Partido Liberal, Alejandro Carlos Chacón.