Proyectos agroindustriales y de infraestructura: elefantes blancos de la región
La planta procesadora de tomates y frutas, que fue presentada como la solución para el sector agropecuario, se ha convertido en un monumento al abandono. La maquinaria, ahora oxidada, permanece en las instalaciones de Corponor-Ocaña.
El Palacio de Justicia, otro proyecto emblemático, se encuentra cerrado por fallas estructurales, a pesar de los millonarios recursos invertidos.
Asimismo, el centro de operaciones del Segundo Distrito de la Policía, planeado desde 2016, sigue siendo un terreno baldío debido a problemas geológicos y de seguridad, según voceros cívicos.