Congresistas tanto del partido Republicano como del Demócrata en Estados Unidos se distanciaron de la política militar del presidente Donald Trump en el Caribe y criticaron duramente los ataques contra supuestas embarcaciones de narcotraficantes que han generado una grave crisis diplomática con Colombia.
La controversia escaló después de que el presidente de Colombia, Gustavo Petro, condenó los ataques estadounidenses, calificándolos de "asesinato" y ejecuciones extrajudiciales. Petro aseguró que al menos uno de los ataques ocurrió en aguas territoriales colombianas, lo que representa una violación a la soberanía nacional.
Además, el mandatario colombiano sostuvo que una de las víctimas, identificada como Alejandro Carranza, era un pescador de Santa Marta y no un "narcoterrorista", como argumenta la administración Trump. Según Petro, la embarcación de Carranza estaba a la deriva por una falla mecánica y no tenía vínculos con el narcotráfico.
El jefe de Estado sugirió que el objetivo real de la ofensiva no es la lucha antidrogas, sino "controlar América Latina" y "obtener petróleo barato de Venezuela". Las tensiones diplomáticas llevaron a que Trump llamara a Petro "líder narcotraficante ilegal" y a que Colombia retirara a su embajador en Washington.
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En medio de esta tensión, voces influyentes del Congreso estadounidense se alinearon con las preocupaciones sobre la legalidad y la moralidad de las operaciones.
El senador republicano Rand Paul publicó un video y un mensaje en la red social X donde rechazó la estrategia militar. Paul explicó que en Estados Unidos no se "vuelan barcos" frente a Miami, a pesar de que la Guardia Costera detiene embarcaciones sospechosas de llevar drogas.
Señaló que la sospecha resulta ser errónea en aproximadamente el 25 % de los casos y que "por eso no disparamos y volamos barcos frente a Miami". El senador enfatizó que a todos, "incluso a los peores de los peores" en su país, se les garantiza el debido proceso y un juicio.
"No podemos simplemente matar indiscriminadamente porque no estamos en guerra. ¡Es una ejecución sumaria!", escribió Paul.
El republicano también cuestionó la justificación de la Casa Blanca, al afirmar que en Venezuela no se produce fentanilo y que las embarcaciones atacadas son botes pequeños con motor fuera de borda.
Paul indicó que esos botes no tienen "camino a Florida" y que, para llegar allí, necesitarían reabastecerse de combustible 20 veces, sugiriendo que su destino más probable era Trinidad y Tobago.
"La conclusión es que la ejecución sin proceso no es justicia, y volar barcos extranjeros es una receta para el caos", concluyó el senador.
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Por su parte, el representante demócrata Jim McGovern también utilizó la plataforma X para expresar su rechazo. McGovern respondió a una alerta de noticias de The New York Times sobre la crisis, la cual reportaba que Petro acusó a EE.UU. de matar a un pescador inocente y que Trump amenazó con cortar la ayuda.
"Estados Unidos no está en guerra con Colombia", afirmó McGovern. El congresista demócrata calificó los ataques militares con drones que matan personas como "ilegales según las leyes estadounidenses e internacionales".
Advirtió que "las acciones de Trump están causando un daño increíble a las relaciones entre Colombia y Estados Unidos"
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