Un estremecedor episodio de violencia intrafamiliar ha causado conmoción en Nueva Jersey, Estados Unidos, luego de que una joven de 20 años fuera arrestada tras presuntamente atacar con un cuchillo a su hermano de apenas dos años. El caso, que sigue bajo investigación, ha despertado gran preocupación por las circunstancias en las que ocurrió y por la aparente alteración mental de la agresora.

La madre descubrió la escena del ataque

Los hechos se registraron el pasado 1 de noviembre en una vivienda del sector de Brick Township, en el condado de Ocean. De acuerdo con las autoridades, una llamada al 911 alertó a los agentes sobre una emergencia doméstica. Al llegar al lugar, cerca de las 2:30 de la tarde, los uniformados encontraron al pequeño con heridas en el pecho y un cuchillo ensangrentado a su lado.

La madre, quien también se encontraba en la vivienda, relató que escuchó gritos provenientes de una de las habitaciones y, al ingresar, halló a su hijo herido. De inmediato pidió auxilio mientras intentaba controlar la hemorragia. El niño fue trasladado por paramédicos al Centro Médico Universitario Jersey Shore, en Neptune, donde los médicos lograron estabilizarlo tras una delicada cirugía. Actualmente, su condición es estable, aunque permanece bajo observación.

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La agresora dijo haber actuado por “una voz”

Durante la detención, la joven, identificada como Marlene Rodríguez, manifestó que una voz en su cabeza le había ordenado atacar al menor. Esta declaración llevó a las autoridades a considerar la posibilidad de que la mujer padezca un trastorno mental no diagnosticado. Por el momento, se encuentra bajo custodia y está siendo sometida a una evaluación psiquiátrica.

El Departamento de Servicios de Menores y Familias también analiza el entorno familiar para determinar las condiciones en que vivían los niños y garantizar la protección del sobreviviente.

Mientras tanto, Rodríguez enfrenta cargos por intento de asesinato, posesión ilegal de arma y poner en peligro el bienestar de un menor. Se espera que en los próximos días comparezca ante un juez para una audiencia de detención.

Las autoridades locales continúan recopilando pruebas y testimonios con el fin de esclarecer los motivos detrás del ataque, que ha dejado a toda una comunidad consternada por su brutalidad y las posibles implicaciones de salud mental en la agresora.

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