En el pasado fue usado para dar a entender que la carta tenía a una persona como destinatario, luego, se usó como una medida de peso. En la actualidad, es el que separa el nombre del dominio del correo electrónico. A los cambios se adapta y no pasa de largo, así es la historia de la arroba.
Este famoso símbolo proviene de Arabia, siendo su término original “Ar-roub” que significa “cuarta parte”. Se representa con una “a” rodeada de un círculo: @, esto se debe a que en el pasado, cuando los escribanos copiaban los libros en latín, se dieron cuenta de que era más fácil unir las letras “a” y “d” juntas para ahorrar tiempo, pues esta preposición (ad) en latín significa “hacía” o “hasta”.
Entérese: J Balvin será premiado en los Billboard por su trabajo filantrópico
“Al momento de copiar en los textos antiguos o los manuscritos, los que escribían eran los escribanos, no todo el mundo sabía hacer eso, entonces, lo que hacían ellos para realizar su trabajo más eficiente era usar abreviaciones, y eso se ve un montón, hay tanto en griego, latín, español antiguo y el medieval”, comenta Angie Claro, profesional en Español y Filología Clásica.
Dicha abreviación (ad) debían escribirla varias veces en los manuscritos y para ahorrar tiempo, decidieron emplear el símbolo, incluso, comenzaron a implementarlo en cartas oficiales antes del nombre del destinatario. Por ejemplo: @Luciana, en vez de copiar, hacia Luciana o dirigida a Luciana.
“He visto varios manuscritos y abreviaciones y me parece muy natural que, alguien que tenía que escribir rápido y a mano, quisiera abreviar la a y d de esa forma”, asegura Claro.